Irán está ampliando su enriquecimiento de uranio más allá del umbral de alto enriquecimiento del 20% de pureza en una planta de Natanz en la que ya enriquece hasta el 60%, pero la nueva actividad no implica la conservación del producto, dijo el lunes el organismo de control nuclear de la ONU.
Es probable que la medida ayude a Irán a perfeccionar sus conocimientos sobre el proceso de enriquecimiento -algo que las potencias occidentales suelen condenar porque es irreversible-, pero como esta vez no se recoge el producto, no acelerará de inmediato la producción iraní de uranio enriquecido hasta acercarse al grado de armamento. Sin embargo, ha llevado al Organismo Internacional de la Energía Atómica a “aumentar la frecuencia y la intensidad de sus actividades de salvaguardia” en la Planta Piloto de Enriquecimiento de Combustible (PFEP) de Natanz, situada en la superficie, según ha declarado el OIEA en un informe visto por Reuters. En torno al 90% del uranio se considera apto para la fabricación de armas.
El OIEA dijo en una declaración que resume el informe que Irán le informó la semana pasada de cambios en la configuración de las centrifugadoras, máquinas que enriquecen uranio, en la planta: Irán alimentaría uranio enriquecido hasta el 20% en un número limitado de centrifugadoras adicionales sin recoger el producto.
“El 25 de octubre de 2021, la Agencia verificó que Irán comenzó a alimentar (gas de hexafluoruro de uranio) enriquecido hasta el 20% de U-235 en una sola centrífuga IR-6 en la línea 2 de I+D en la PFEP y que el producto resultante y los flujos de colas se volvían a combinar”, dice el informe del OIEA, lo que significa que después de separar el producto enriquecido se mezclaba con los residuos de la centrífuga y no se guardaba.
Irán había dicho que planeaba alimentar también uranio enriquecido hasta el 20% en otras centrifugadoras individuales o en cascadas, o grupos, de máquinas de tamaño pequeño o mediano en la misma línea, pero éstas no estaban siendo alimentadas en ese momento, dijo el OIEA.
Irán aún no ha anunciado una fecha para reanudar las discusiones en Viena sobre la reactivación del pacto nuclear de 2015 bajo el cual frenó su programa nuclear a cambio de un alivio de las sanciones económicas de Estados Unidos, la UE y la ONU.
El entonces presidente estadounidense, Donald Trump, abandonó el pacto en 2018 y volvió a imponer duras sanciones estadounidenses. Alrededor de un año después, Irán comenzó a violar algunos de los límites del acuerdo sobre el enriquecimiento de uranio.