El presidente de Irán, Hassan Rouhani, pidió el sábado al país que “resistiera y se uniera” contra la presión de Estados Unidos en lo que llamó una “guerra de esperanza” contra la República Islámica.
Ha pasado casi un año desde que el presidente Donald Trump volvió a imponer las severas sanciones de Estados Unidos luego de salir de un acuerdo nuclear histórico entre las principales potencias y Irán.
“Estados Unidos solo abandonará este juego cuando se dé cuenta de que no puede lograr nada. No tenemos más remedio que resistir y unirnos”, dijo Rouhani en un discurso televisado.
La economía de Irán ha sido golpeada desde que regresaron las sanciones. La inflación se ha disparado, su moneda se ha desplomado y las importaciones son ahora mucho más caras.
Aumentando la apuesta inicial, la Casa Blanca anunció la semana pasada que pondría fin a las exenciones de compra de petróleo otorgadas a los principales clientes de Irán, incluidos China, India y Turquía, que recortarán el acceso de Irán a su principal fuente de ingresos en divisas.
“Nuestra guerra de hoy es la guerra contra la esperanza. Quieren romper nuestra esperanza y nosotros tenemos que romper su esperanza de derrotar a Irán”, dijo Rouhani.
“Quieren recortar nuestra oferta de moneda extranjera … buscan sembrar la discordia en el país. Quieren que estemos divididos, que nos enfrentemos unos a otros”, agregó.
Rouhani ha prometido que Irán continuará suministrando petróleo a sus principales clientes a pesar de las medidas unilaterales adoptadas por los Estados Unidos.