El presidente iraní, Hassan Rouhani, afirmó el lunes que la posición de Irán en el Oriente Medio nunca había sido más fuerte, pero advirtió que el régimen estaba en peligro a menos que se frenase la lucha interna entre facciones políticas.
«La grandeza de la nación de Irán en la región es más que en cualquier otro momento», dijo Rouhani en un discurso en Teherán, transmitido por la emisora estatal y citada por la AFP.
«En Irak, Siria, Líbano, norte de África, en la región del Golfo Pérsico, ¿dónde se pueden tomar medidas sin Irán?» él agregó.
Rouhani no respondió directamente a los comentarios del domingo del secretario de Estado de los Estados Unidos, Rex Tillerson, quien pidió a las milicias respaldadas por Irán que luchan contra los jihadistas en Iraq que se «vayan a casa».
Al mismo tiempo, Rouhani advirtió que el régimen de Irán estaba bajo la amenaza de una feroz lucha interna entre conservadores y moderados.
«No deberíamos pensar que dañar una parte del sistema fortalecerá la otra parte. No, todo el sistema colapsará», dijo.
Rouhani, promocionado por Occidente como un «moderado», ganó la reelección hace cinco meses y, como parte de su campaña, se pronunció en público en contra de “la línea dura”, en particular los “Guardias Revolucionarios” que tienen una gran influencia política en el país.
Pareció tener un cambio de opinión hace dos semanas, cuando advirtió al presidente estadounidense Donald Trump que no incluya en la lista negra a los Guardias Revolucionarios, diciendo que hacerlo sería el «error más grande de todos».
La llamada “línea dura” ha criticado el acuerdo nuclear que la administración de Rouhani firmó con las potencias mundiales en 2015.
El domingo, la televisión estatal leyó en su totalidad una carta del Líder Supremo Ayatollah Ali Khamenei de 2015 en la que advirtió contra la confianza en los Estados Unidos y otros signatarios del acuerdo.
Aunque el acuerdo fue respaldado explícitamente por el Líder Supremo, los de la “línea dura” han criticado duramente a Rouhani por ir demasiado lejos en sus esfuerzos por reconstruir sus relaciones con Occidente.
Esas críticas se han vuelto más señaladas en los últimos días ya que Trump se ha negado a volver a certificar el acuerdo, poniendo en duda su futuro.
Rouhani insistió el lunes que Trump estaba fallando en sus esfuerzos por socavar el acuerdo.
«Todos los días (Trump) dice que este acuerdo es el peor acuerdo en la historia. Como él dijo, es vergonzoso para Estados Unidos, pero aún así no ha podido hacer nada con este acuerdo», dijo Rouhani, según AFP .
Los líderes iraníes han intensificado su retórica en los últimos días y semanas, ya que se hizo más claro que Trump estaba planeando no recertificar el acuerdo.
Rouhani criticó el discurso de Trump y prometió ampliar el programa de misiles balísticos de Irán.
Hablando en la televisión iraní, Rouhani desestimó los «insultos y falsas acusaciones» de Trump, y dijo que Irán se apegaría al acuerdo nuclear siempre que fuera beneficioso.
Jamenei declaró la semana pasada que Teherán se mantendría en el acuerdo nuclear de 2015 mientras los demás signatarios lo respetaran, pero que «rompería» el acuerdo si Washington se retiraba.