Tras el presunto ataque aéreo israelí, Moscú dice al régimen de Assad y Hezbolá que no respondan y “se concentren en el panorama más amplio”.
Rusia ha asegurado a Israel que no permitirá que Irán y Hezbolá amenacen al Estado judío desde Siria, donde Moscú está luchando junto a Teherán y el grupo terrorista libanés a favor del presidente sirio, Bashar Assad.
Israel ha advertido varias veces de las ambiciones de Irán de establecer un punto de apoyo militar en Siria que amenazaría a Israel. En su reunión del primer ministro Benjamín Netanyahu con el presidente ruso Vladimir Putin el mes pasado, el premier israelí subrayó la amenaza de la presencia de Irán en la frontera norte de Israel.
Tras las advertencias de Netanyahu de que Israel está dispuesto a actuar para evitar una presencia militar iraní en Siria, un alto funcionario ruso dijo que Moscú está consciente de las preocupaciones de Jerusalén y no permitirá que Irán y Hezbolá “se excedan” en Siria.
La promesa rusa de limitar las actividades de Irán y Hezbolá en Siria se produce días después del ataque aéreo en Siria atribuido a Israel en instalaciones utilizadas por el régimen de Assad para almacenar misiles y armas químicas.
Los analistas especularon que el ataque envía un mensaje a Rusia y Estados Unidos de que Israel no tolerará las violaciones de sus líneas rojas con respecto a Irán en Siria y señala su descontento por el acuerdo del cese al fuego en el sur de Siria, que según los informes permitirá que las milicias respaldadas por Irán ocupen posiciones en Siria a menos de diez kilómetros de la frontera con Israel.
El martes, el ministro de Defensa Avigdor Lieberman advirtió que “cualquier provocación de nuestros vecinos del norte contra Israel terminará “muy mal” para ellos”.
“Sugiero a nuestros vecinos del norte que no intenten provocar o amenazarnos, porque nos tomamos en serio estas amenazas”, declaró en una ceremonia en honor a los soldados beduinos caídos.
Lieberman se refería específicamente a los comentarios del viceministro sirio Faisal Mekdad, quien dijo el domingo a un canal de televisión libanés que Israel “pagará un precio alto” por llevar a cabo ataques aéreos en Siria.
Un informe de Yedioth Ahronoth indica que el primer ministro Benjamín Netanyahu y el jefe del Mossad, Yossi Cohen informaron al presidente ruso acerca de las intensiones de Irán de profundizar su presencia militar en Siria a través del despliegue de miembros del Cuerpo de Guardias Revolucionarios Iraníes y milicias chiítas de Irak , Afganistán y Pakistán.
Ambos presentaron a Putin información de inteligencia sobre los esfuerzos de Irán para establecer una base naval en la ciudad portuaria de Tartus en Siria y una fábrica de producción de misiles en el Líbano. Enfatizaron que los intereses de Irán no están alineados con los de Rusia y que Teherán seguirá sus propios planes en Siria.
“El plan iraní a largo plazo no incluye a Rusia. Los iraníes también intentarán echarlos de ahí”, dijo el funcionario ruso citando a Netanyahu y Cohen.
Fuente: Cadena Judía de Noticias Vis a Vis