El senador republicano de Carolina del Sur, Lindsey Graham, presentó una resolución el miércoles declarando que cualquier aumento de tensiones de Hezbolá contra Israel, que derive en una gran confrontación, debe ser considerado un ataque instigado y llevado a cabo por Irán. Esta resolución del Senado destaca que “los esfuerzos para disuadir a Hezbolá y a la República Islámica de Irán son más efectivos cuando el presidente mantiene todas las opciones sobre la mesa, incluida la opción militar”.
La resolución responsabiliza tanto a Irán como a Hezbolá de cualquier daño a la población libanesa que resulte de un ataque de Hezbolá contra Israel. Además, exhorta al Congreso y al presidente a usar “todas las herramientas diplomáticas y capacidades de proyección de poder” para responsabilizar a Irán y Hezbolá.
Graham también presentó una Autorización para el Uso de la Fuerza Militar que permitiría el uso de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos contra Irán, argumentando que este país amenaza la seguridad nacional estadounidense con el desarrollo de armas nucleares. La propuesta permitiría a Estados Unidos emplear la fuerza militar para detener cualquier posible proliferación nuclear por parte de Irán.
El senador Graham manifestó su preocupación, afirmando que “es una certeza” que si Estados Unidos no toma medidas, Irán podría poseer un arma nuclear en cuestión de semanas o meses. Expresó su inquietud sobre el informe del director de Inteligencia Nacional respecto al avance del programa nuclear iraní, indicando que “su capacidad para enriquecer uranio a nivel de armamento es ahora una cuestión de semanas, no meses”. Además, Graham subrayó que tanto Estados Unidos como Israel deben considerar a Irán responsable de cualquier agresión de Hezbolá, sugiriendo incluso ataques a instalaciones críticas como refinerías de petróleo.
“Si Hezbolá ataca a Israel, espero que tengan una refinería menos”, declaró Graham, señalando la importancia de golpear económicamente al régimen iraní. Según el senador, sin las refinerías, Irán no podría financiar sus actividades terroristas. “Israel no es el malo aquí”, añadió Graham, subrayando la necesidad de responsabilizar a Irán por las acciones de sus agentes.
En referencia a los ataques del 7 de octubre, Graham culpó a Irán de orquestar la muerte de 1.200 judíos a través de Hamás, y destacó que, si Hezbolá inicia un ataque, Israel debería responder con fuerza, incluyendo a Irán en su lista de objetivos. Además, Graham afirmó que Irán no debería poder utilizar a sus aliados en el Líbano sin enfrentar consecuencias directas en su propio territorio.
El senador expresó su convicción de que sus colegas republicanos, y posiblemente algunos demócratas, apoyarán esta iniciativa, destacando la urgencia de tomar medidas decisivas para evitar un empeoramiento de la situación. Graham concluyó señalando que Israel probablemente tendrá que actuar con firmeza pronto y que es necesario “reiniciar” la estrategia actual.
Finalmente, Graham comentó sobre su reciente encuentro con familias de rehenes estadounidenses en Washington D.C., antes del discurso del primer ministro Benjamin Netanyahu ante el Congreso. Indicó que la mejor manera de liberar a los rehenes es hacer que el costo de las acciones de Irán sea insostenible, y afirmó que las recientes acciones de Israel en Irán son una continuación de una política efectiva para el estado judío.