Las fuerzas de seguridad iraquíes tienen un nuevo problema con el que lidiar, ya que los terroristas del Estado Islámico (ISIS) han estado atacando las líneas de energía eléctrica, normalmente del tipo que viaja largas distancias en grandes pilones. El grupo jihadista mundial ha atacado docenas en las últimas semanas.
Ahora Irak dice que ha emboscado a algunos de los terroristas cerca de la ciudad de Hit. Ha logrado frustrar ataques en la provincia de Diyala.
Para Irak, esto es solo un pequeño respiro en un verano caluroso en el que parece que no se está generando suficiente electricidad. Los apagones son normales. Irán tampoco está transfiriendo electricidad a Irak porque tiene su propia crisis. El ISIS ha empezado a atacar esta infraestructura como forma de enviar un mensaje de que todavía controla el campo.
Muchos iraquíes utilizan generadores o se ven obligados a quedarse sin electricidad cuando esto ocurre.
“Entre 44 y 45 torres de electricidad en Irak han sido objetivo de los terroristas en los últimos días, la mayoría de las cuales han sido reparadas”, dicen los informes locales.
Mientras tanto, en otras partes de Irak, se han incrementado los ataques a las fuerzas estadounidenses por parte de las milicias pro-iraníes. El ISIS también está atacando puestos de control iraquíes en algunas partes del país. Esto significa que Irak se enfrenta a numerosos desafíos para su seguridad básica.
Irán está tratando de apoderarse de partes de Irak y presionar a Estados Unidos para que se vaya; el ISIS está tratando de apoderarse de otra parte. En medio están los iraquíes de a pie, la región autónoma del Kurdistán y las zonas en las que la gente quiere un respiro tras décadas de guerra y privaciones.