Un ataque aéreo contra un convoy que transportaba combustible a través de la frontera iraquí con Siria causó la muerte de al menos 10 personas a última hora del martes, según informaron miembros de grupos paramilitares que operan en la zona.
El ataque afectó a un convoy de unos 15 camiones que habían cruzado de Irak a Siria cerca de Al-Qaim, dijeron dos funcionarios paramilitares a The Associated Press.
No estaba claro quién llevó a cabo el ataque. Tampoco estaba claro de dónde procedía el convoy, pero los oficiales paramilitares dijeron que algunos de los muertos eran iraníes.
Se cree que la zona alberga a varios grupos militantes proiraníes. En el pasado, los ataques cerca de Al Qaim se han atribuido a Israel o a Estados Unidos.
El ataque se produjo un día después de que un ciudadano estadounidense, Stephen Edward Troell, de 45 años, recibiera un disparo mortal en el centro de Bagdad.
Troell, oriundo de Tennessee, fue asesinado por desconocidos en su coche cuando llegaba a la calle donde vivía con su familia en el céntrico barrio de Karrada, en Bagdad. Se trata de un raro asesinato de un extranjero en Irak en los últimos años, ya que las condiciones de seguridad han mejorado.
Ningún grupo reivindicó el asesinato de Troell. El primer ministro Mohammed Shia al-Sudani, que lleva menos de dos semanas en el cargo, ordenó una investigación.
En una conferencia de prensa celebrada el martes, Sudani insinuó que el atentado podría haber sido perpetrado por rivales que pretendían socavar su cargo de primer ministro, y añadió: “Aquellos que quieran poner a prueba a nuestro gobierno en términos de seguridad fracasarán”.
La embajada de Estados Unidos en Bagdad dijo que seguía de cerca la investigación de las autoridades iraquíes, pero declinó hacer más comentarios.