La economía de Jordania ha estado sufriendo debido a la presencia de unos 1,3 millones de refugiados sirios que han huido de la guerra civil de ocho años de ese país, según un funcionario del Ministerio de Planificación jordano.
Issam Al-Majali, portavoz del ministerio encargado de supervisar a los refugiados, dice que la afluencia “causó un enorme aumento de los gastos gubernamentales entre los años 2011 y 2018 debido a los costos que implica responder a las necesidades de los refugiados”.
Un documento publicado por el ministerio destaca la reducción de los servicios básicos para los refugiados, así como los gastos que se han triplicado debido a la necesidad de asegurar las fronteras y reforzar la seguridad interna.
Según un informe publicado el mes pasado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), solo 660.000 de los sirios que han huido a Jordania se han inscrito en el organismo, que les proporciona algunos medios de apoyo.
Todo ello, según Majali, ha provocado “una enorme disminución del crecimiento económico de Jordania”, del 6,1% entre los años 2000 y 2010 al 2,4% entre 2011 y 2018, y un “aumento de la deuda jordana”, del 69% en 2010 al 95% a finales de 2018.
También han existido otras áreas de impacto.
“El desempleo entre los jordanos aumentó del 12% en 2012 al 19% en el primer trimestre de 2019, mientras que el nivel de pobreza aumentó del 14,4% en 2010 al 20% a finales de 2016”, dijo.
“A pesar del apoyo de la comunidad internacional al gobierno jordano en respuesta a los refugiados, su presencia le ha costado a Jordania unos 1.400 millones de dólares”, añadió.
Además, dijo, el cierre de la frontera con Siria ha perjudicado la economía nacional, ya que ese país era un punto de tránsito para el comercio entre Jordania y lugares como Turquía y Líbano.
El economista y analista jordano Jawad Al-Anani está de acuerdo, pero dice que las fronteras cerradas también han afectado el comercio bilateral.
“Siria solía ser una de las fuentes más importantes de productos de calidad a bajo costo”, dice. “Además, Jordania solía exportar productos a Siria, y teníamos inversiones en Siria”.
Anani también expuso la forma en que los refugiados han agobiado al país.
“Los ingresos personales han disminuido, mientras que los sirios han aumentado la necesidad de electricidad, así como la demanda de las escuelas y los servicios de salud, lo que significa un aumento de los costos para el gobierno”, dijo.
A partir de 2016, la Unión Europea ha puesto a disposición de Jordania más fondos en forma de subvenciones y préstamos, al tiempo que ha facilitado las exportaciones a Europa como forma de superar la pérdida de comercio regional.
Majali dijo que Jordania considera que la presencia de los refugiados es solo “temporal”, y añadió que Ammán “no deportará a ningún refugiado, lo que está en consonancia con el derecho internacional”.