El gobierno de Egipto ha publicado un plan para construir un centro de comercio mundial en la isla de Al-Warraq, en el río Nilo. Pero no todos están contentos con la idea.
El plan publicado el mes pasado por el Servicio de Información Estatal (SIS) oficial de Egipto, describía el proyecto de la Ciudad de Horus, como: “Una ciudad y un centro de comercio mundial en suelo egipcio, comparable a los centros comerciales más destacados del mundo”. Horus es el antiguo dios egipcio del sol, representado con cabeza de halcón.
El proyecto de más de 900 millones de dólares, que se dice forma parte de un plan maestro para eliminar las comunidades no organizadas y los barrios marginales, construirá ocho zonas de inversión, una zona comercial, una zona de viviendas diferenciada formada por torres residenciales, un parque central, una zona verde, dos puertos deportivos, un paseo fluvial turístico, una zona cultural y una cornisa turística en los 1.516 acres, o 6,36 kilómetros cuadrados, de la isla.
Los residentes de la isla de Al-Warraq están descontentos con el proyecto, que requiere la demolición de viviendas y la destrucción de campos agrícolas para la construcción de Horus City.
El lunes estallaron protestas en la isla contra el proyecto, lo que llevó a las fuerzas de seguridad egipcias a dispersar violentamente las manifestaciones y a detener a siete personas. Las protestas se produjeron después de que las autoridades llegaran a la isla para medir algunos edificios residenciales de la zona de Hawd al-Qalamiyeh, que van a ser demolidos.
La isla de Al-Warraq, con una población de unos 90.000 habitantes, está situada en el río Nilo, en la gobernación de Giza, y sólo se puede llegar a ella en ferry. Un decreto de 1998 declaró Al-Warraq y otras 143 islas del Nilo como reservas naturales y limitó la residencia en ellas. Pero en 2017, el gobierno dio un giro y declaró que expropiaría Al-Warraq para uso público, y comenzó a demoler algunas casas. Un decreto oficial en julio revocó el estatus de Al-Warraq y otras 16 islas como protectorados naturales.
Hazem Salem Al Dmour, director general del centro de estudios STRATEGIECS, con sede en Ammán, declaró a The Media Line que el gobierno egipcio pretende aprovechar la ubicación única de la isla para transformarla en una zona económica prometedora.
Destacó que Al-Warraq es una de las islas más grandes de Egipto y que limita con tres gobernaciones: Qalibiya, El Cairo y Giza.
Al Dmour señaló que, desde 2013, el gobierno egipcio se ha centrado en dos motores principales para estimular su economía: el crecimiento urbano y la estabilidad financiera.
El primero, dijo Al Dmour, “incluye el desarrollo de las infraestructuras y la construcción de gigantescos proyectos urbanos que conducirán e impulsarán al segundo, el avance del país hacia la financiación de sus proyectos de infraestructuras que se espera que conviertan a El Cairo en una ciudad atractiva para las inversiones, para aumentar las exportaciones y reducir el endeudamiento soberano”, dijo.
Al Dmour señaló que en los últimos años se han llevado a cabo varios proyectos de desarrollo gigantescos en Egipto.
El proyecto de desarrollo
El proyecto de desarrollo de la isla de Warraq tiene un coste de 17.500 millones de libras egipcias, unos 913 millones de dólares. Según el informe del gobierno, el estudio de viabilidad del proyecto estimó los ingresos totales del mismo en 122.540 millones de libras egipcias, unos 6.000 millones de dólares, con unos ingresos anuales de 20.400 millones de libras egipcias, unos 1.000 millones de dólares, durante 25 años.
El proyecto de desarrollo de la isla, añadió Al Dmour, sirve a la economía egipcia en tres ámbitos principales.
Para empezar, dijo, está previsto que se convierta en un centro de comercio mundial, con estándares globales, y con torres y viviendas, que incluyen servicios integrados de salud, educación y ocio. Además, servirá a la economía egipcia a través de la promoción y creación de oportunidades de inversión con alta rentabilidad financiera.
Al Dmour cree que la actual situación económica mundial podría afectar a las expectativas de ingresos. “No se puede exagerar la rentabilidad del proyecto, sobre todo porque asistimos a una situación económica mundial apremiante que hace que domine la incertidumbre”, dijo.
Mohamed Abobakr, economista y analista de investigación egipcio, declaró a The Media Line que el gobierno ha puesto en marcha proyectos similares en distintos lugares de El Cairo, como el céntrico barrio de Maspero.
El proyecto de desarrollo de la isla se enfrenta a grandes problemas.
El más grave, según Al Dmour, es que desde el año 2000 existe una crisis entre la población de la isla y los sucesivos gobiernos egipcios, que ha provocado enfrentamientos entre los residentes y los servicios de seguridad, incluidos la policía y el ejército.
El coste del proyecto también podría representar un problema. Al Dmour dijo.
El coste de ejecución del proyecto asciende a 17.500 millones de libras egipcias, unos 913 millones de dólares; además, el gobierno tiene que indemnizar por cada acre de tierra agrícola y por las viviendas, así como proporcionar viviendas alternativas a los residentes de la isla.
Por último, hay un problema legal. “Los residentes de la isla obtuvieron una sentencia judicial en 2002 que les daba derecho a sus tierras”, señaló Al Dmour.
Abobakr cree que el proyecto acabará ejecutándose, pero que el gobierno encontrará cierta resistencia y entablará muchas negociaciones con los habitantes de la isla.