AL-MUKALLA – Un líder militar de Hezbolá que lucha por los Hutíes, apoyados por Irán, ha muerto en enfrentamientos con las fuerzas gubernamentales en la provincia central de Marib, según reveló el jueves el ministro de Información de Yemen.
En un tuit, Moammar Al-Eryani dijo que el asesor experto Akram Al-Sayed murió cuando las tropas del ejército yemení bombardearon las posiciones de los hutíes al sur de Marib, infligiendo un golpe a un empuje de la milicia de los hutíes para tomar el control de la ciudad de Marib.
Los Hutíes cuentan con el apoyo de miles de combatientes, muchos de ellos procedentes de Irán, Líbano e Irak.
Al-Eryani hizo un llamamiento a la comunidad internacional y a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU para que “condenen esta flagrante injerencia, que socava los esfuerzos de desescalada en Yemen, continúa el derramamiento de sangre y agrava el sufrimiento humanitario de los yemeníes”.
El ministro instó a intensificar las sanciones contra el Hezbolá libanés y exigió al gobierno de Líbano que frene la afluencia de combatientes del Hezbolá a Yemen.
El gobierno yemení lleva mucho tiempo acusando a Irán de desplegar combatientes de sus milicias proxy en la región para reforzar a los hutíes.
En agosto, el gobierno yemení anunció la muerte en un ataque aéreo de la coalición en Serwah de un oficial militar iraní que asesoraba militarmente a los hutíes en primera línea en Marib.
El año pasado, aviones de la coalición árabe mataron a dos expertos militares de Hezbolá en Yemen durante los ataques aéreos contra un campo de entrenamiento en las afueras de Sanaa, controlada por los hutíes.
Mientras tanto, fuentes en Marib informaron de un número creciente de ataques de los hutíes contra las tropas gubernamentales en las últimas dos semanas, que se habían concentrado en una cadena de montañas conocida como Al-Balaq, en los límites del sur de Marib. Los intensos combates habían dejado decenas de combatientes muertos en ambos bandos, dijeron.
El Ministerio de Defensa yemení desmintió las afirmaciones de los hutíes de que el grupo se había hecho con el control de zonas estratégicas del este de Al-Balaq, afirmando que las tropas del ejército y los miembros de las tribus aliadas habían repelido los ataques.
Varios civiles resultaron heridos el jueves cuando dos misiles disparados por los hutíes atravesaron el campamento de Al-Hamma, que alberga a 264 familias de desplazados internos en las afueras de Marib, dijo la Unidad Ejecutiva del gobierno.
Añadió que el número de desplazados que viven en la ciudad de Marib y sus alrededores ha aumentado a 2.231.460 después de que 96.328 personas hayan huido de los distritos del sur de Marib desde principios de septiembre.