Todas las gobernaciones de Irak estarán bajo toque de queda a partir de las 7 de la tarde del lunes, en medio de los violentos enfrentamientos en la Zona Verde de Bagdad que estallaron después de que los seguidores del clérigo chiíta iraquí Muqatada al-Sadr asaltaran el palacio presidencial a primera hora del día.
Las últimas manifestaciones se producen después de que Sadr anunciara su “retirada definitiva” de la política y el cierre de todas las organizaciones afiliadas a él. Irak se ha visto arrastrado por la agitación política en el último año, ya que tanto Sadr como sus rivales han intentado formar gobierno sin éxito.
No es la primera vez que el clérigo iraquí anuncia su retirada. En 2013 y 2014 hizo anuncios similares, pero finalmente volvió a la política.
Un vídeo de la Zona Verde de Bagdad mostró a los manifestantes entrando en el palacio presidencial, y muchos de ellos nadando en la piscina del palacio.
El lunes por la tarde se oyeron disparos en la Zona Verde, y los primeros informes indicaban que las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), respaldadas por Irán, estaban utilizando munición real contra los manifestantes sadristas. Según los informes, los vídeos procedentes del lugar de los hechos mostraban a los manifestantes corriendo mientras se oían fuertes disparos de fondo. Se ha informado de múltiples víctimas.
Las fuerzas de seguridad iraquíes piden a los manifestantes que se retiren de la Zona Verde
El Mando de Operaciones Conjuntas de Irak pidió a los manifestantes que habían irrumpido en el palacio presidencial que se retiraran de la zona, subrayando que se habían “adherido a los más altos niveles de autocontrol y comportamiento fraternal para evitar enfrentamientos o el derramamiento de sangre iraquí”.
“Las fuerzas de seguridad afirman su responsabilidad de proteger las instituciones gubernamentales, las misiones internacionales y las propiedades públicas y privadas. El tratamiento de las manifestaciones pacíficas se hace a través de la Constitución y las leyes, y las fuerzas de seguridad cumplirán con su deber de proteger la seguridad y la estabilidad”, añadió el Mando de Operaciones Conjuntas.
El primer ministro iraquí, Mustafa Al-Kadhimi, ordenó el lunes la suspensión de las sesiones del Consejo de Ministros debido a los disturbios.
“Los peligrosos acontecimientos que han tenido lugar hoy en nuestro querido Irak, desde que los manifestantes irrumpieron en la Zona Verde y entraron en las instituciones gubernamentales, indican la gravedad de las consecuencias de la continuación y acumulación de las diferencias políticas”, advirtió Kadhimi.
El primer ministro pidió a Sadr que los manifestantes se retiraran de la Zona Verde.
El asesor de Sadr pide a sus seguidores que escuchen a Jamenei de Irán
Además, el lunes, Kadhim al-Haeri, un clérigo chiíta iraquí de alto nivel que reside en Qom (Irán) y asesor de Sadr, anunció que dimitía de su cargo religioso por enfermedad y vejez.
En su anuncio del lunes, al-Haeri dijo a sus seguidores que todos debían obedecer al líder supremo iraní, Alí Jamenei, y pidió al pueblo de Irak que mantuviera la unidad y la armonía. El clérigo también advirtió a los iraquíes contra los baasistas, Israel y Estados Unidos.