BEIRUT (Reuters) – El presidente libanés, Michel Aoun, ha pedido al embajador ruso Alexander Rudakov imágenes por satélite del 4 de agosto de 2020, cuando una enorme explosión sacudió el puerto de Beirut, según un tuit de la presidencia libanesa del viernes.
La explosión mató a más de 215 personas, hirió a miles y destruyó franjas de la capital libanesa.
El juez Tarek Bitar, principal investigador de la explosión, pidió en mayo imágenes a varios países, según la Agencia Nacional de Noticias libanesa. No nombró a los países.
Altos cargos políticos, entre ellos Aoun, han lamentado en repetidas ocasiones la falta de cooperación de los países con las peticiones de proporcionar imágenes de satélite del día de la explosión.
El ex primer ministro Hassan Diab pidió imágenes a Francia e Italia, pero ha dicho que no las recibió.
La investigación de la explosión, una de las mayores no nucleares del mundo, está estancada en medio de una campaña de desprestigio contra Bitar y de la presión de poderosas facciones.
Muchos libaneses están enfadados porque, más de un año después de la explosión, ningún funcionario de alto nivel ha rendido cuentas por el peor desastre en tiempos de paz del país, que se hunde en el colapso político y económico.
Los posibles donantes de ayuda extranjera han pedido una investigación transparente sobre la explosión, que fue provocada por una enorme cantidad de nitrato de amonio almacenado de forma insegura.