El clérigo libanés Sheikh Sadiq al-Nabulsi, vinculado con Hezbolá, propuso una guerra con Israel como solución a la actual crisis política y económica en Líbano durante una reciente entrevista con Al-Jadeed.
Declaraciones de al-Nabulsi y la situación en la frontera Israel-Líbano
Al-Nabulsi arguyó que la mera existencia de Israel representa una agresión para Líbano, y que la guerra podría ser un medio para cambiar el equilibrio de poder en la región. También insinuó que la resistencia liderada por Hezbolá podría ser la respuesta a la persistente incapacidad del país para seleccionar un presidente.
Estas declaraciones ocurren en un contexto de crecientes tensiones en la frontera entre Líbano e Israel. Las provocaciones de Hezbolá en la zona de las granjas de Shebaa y las subsecuentes represalias israelíes han exacerbado la ya difícil situación.
El secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah, ha declarado que cualquier acción de Israel contra sus puestos fronterizos ocasionará represalias por parte de Hezbolá.
Aumento de tensiones e incidentes en la frontera
En las últimas semanas, hubo varios incidentes violentos a lo largo de la frontera. La violencia incluyó disparos de misiles antitanque hacia la aldea de Ghajar, ataques de artillería israelíes en respuesta y un incendio que se atribuyó a las fuerzas israelíes.
Además, la construcción de una carretera por ciudadanos libaneses cerca de una barrera de hormigón israelí ha aumentado las tensiones, llevando a un estado de alerta para las fuerzas de ambos países y el personal de la FINUL en la zona de Kfarchouba.
La crisis política interna de Líbano
El agravamiento de las tensiones en la frontera ocurre en medio de una profunda crisis política en Líbano. Desde la salida del expresidente Michel Aoun en octubre, el Parlamento libanés ha fallado en doce intentos de elegir a un sucesor, profundizando la crisis económica y política del país.
Los principales contendientes en la elección presidencial son el exministro de Finanzas Jihad Azour, respaldado por los partidos cristianos y la oposición a Hezbolá, y el exministro de Sanidad Suleiman Frangieh, candidato respaldado por Hezbolá y el movimiento Amal.
Los candidatos presidenciales y sus aliados
Azour, actualmente director de Oriente Medio y Asia Central del Fondo Monetario Internacional, es respaldado por los mayores partidos cristianos del país, mientras que Frangieh, líder del Movimiento Marada y aliado de Hezbolá, es el otro principal contendiente.
El respaldo del Movimiento Patriótico Libre a Azour rompe la tradicional alianza de este partido con Hezbolá, reflejando los desacuerdos políticos recientes entre ambos movimientos.
En este contexto de tensiones fronterizas y crisis políticas internas, las palabras del Sheikh al-Nabulsi añaden más incertidumbre al volátil escenario en el Medio Oriente.