TEHERÁN, Irán – El primer ministro de Irak, Mustafá al-Kadhimi, se reunió el domingo con el recién elegido presidente de Irán, Ebrahim Raisi, para hablar de las relaciones económicas entre ambos países.
Kadhimi es el primer líder extranjero que visita al clérigo radical Raisi, y trajo consigo una “delegación política y económica de alto nivel”, dijo la agencia de noticias oficial iraní IRNA.
Kadhimi dijo en una conferencia de prensa conjunta que ambos “discutieron ciertas cuestiones económicas conjuntas y proyectos estratégicos”, así como “el aumento del comercio en interés de ambas naciones”.
Raisi, que asumió el cargo el mes pasado, dijo que también se discutieron “las relaciones financieras y monetarias”.
Como vecino de Irán en el oeste, Irak ha buscado un papel mediador entre Teherán y las naciones árabes.
Ha intentado mediar en las conversaciones entre Irán y Arabia Saudita para calmar las tensiones entre los rivales regionales.
Funcionarios iraníes y saudíes se reunieron en Bagdad en abril, su primera reunión de alto nivel desde que Riad cortó sus lazos diplomáticos con Teherán en 2016.
Una fuente iraquí dijo el viernes que Kadhimi plantearía en Teherán la cooperación energética y las relaciones irano-saudíes.
Otros temas candentes son la deuda de seis mil millones de dólares de Irak con Irán, después de que la escasez le empujara a recurrir a su vecino para cubrir un tercio de sus necesidades de gas y electricidad.
Este verano, Irán suspendió las exportaciones durante varios días por la cantidad pendiente.
Mientras tanto, “el primer ministro iraquí nos dio buenas noticias sobre la exención de visados” para los iraníes, dijo Raisi.
Bagdad “aumentará en la medida de lo posible” el número de personas que podrán participar en la peregrinación de Arbaeen en la ciudad santuario chiíta de Karbala a finales de este mes, añadió el dirigente iraní.
La oficina de Kadhimi había anunciado la semana pasada que hasta 60.000 iraníes podrían acudir.
Arbaeen marca el final del periodo de luto de 40 días por el asesinato del imán Hussein, nieto del profeta Mahoma, a manos de las fuerzas del califa Yazid en el año 680.
El número de visados permitidos a los peregrinos extranjeros ha disminuido considerablemente en los dos últimos años debido a la pandemia de coronavirus.
Irán e Irak libraron una devastadora guerra entre 1980 y 1988, pero la invasión liderada por Estados Unidos en 2003, que derrocó al dictador suní Sadam Husein, dio lugar a una enorme influencia iraní en la política iraquí.