LONDRES – Los Acuerdos de Abraham son una herramienta importante para contrarrestar las amenazas regionales, como Irán, y deben celebrarse, dijo el ex embajador de Estados Unidos en Irak, James Jeffrey, en el primer aniversario del acuerdo.
En una rueda de prensa organizada el lunes por el Woodrow Wilson Center y a la que asistió Arab News, Jeffrey -presidente del programa de Oriente Medio del centro de estudios- dijo que los acuerdos son “un importante paso adelante para la región”.
Establecieron lazos diplomáticos, culturales y económicos entre los EAU y Bahréin, por un lado, e Israel, por otro. Marruecos y Sudán se adhirieron posteriormente a los acuerdos, tras las gestiones diplomáticas de Estados Unidos.
Los acuerdos “dan a la administración (Biden) y, sobre todo, a los Estados de la región, otra herramienta para construir posiciones comunes y tratar los problemas que están sacudiendo a toda la región, y que lo han hecho durante décadas”, dijo Jeffrey, cuya carrera diplomática de varias décadas abarcó puestos en Irak, Siria, Turquía y los Balcanes, entre otros.
Entre las amenazas más importantes que comparten los países árabes e Israel están los misiles de fabricación iraní, añadió.
“Cuando se observan las amenazas a la región desde el punto de vista militar-violento, se trata de sistemas de misiles cohete de origen iraní y diversos movimientos terroristas”, dijo. Para los Estados árabes, “Israel es visto como un socio muy eficaz en ambas cuestiones”, añadió.
“Francamente, los cohetes que vuelan hacia sus capitales o sus aeropuertos no es solo algo a lo que se enfrenta Israel estos días, y el origen de todos esos cohetes es, en última instancia, Irán”.
Arabia Saudita, dijo Jeffrey, es “la gran ganadora” de cualquier acercamiento entre los israelíes y el mundo árabe, pero el Reino ha dejado claro que cualquier acuerdo entre él e Israel está supeditado a una solución justa y duradera para el pueblo palestino.
A principios de este año, el ministro saudí de Asuntos Exteriores, el príncipe Faisal bin Farhan, declaró: “En general, los Acuerdos de Abraham han tenido un efecto positivo en las relaciones en la región, y debemos aprovecharlo para encontrar una solución para los palestinos”.
Jeffrey también abordó la retirada de Estados Unidos de Afganistán, expresando su convicción de que, por primera vez en 50 años, Estados Unidos había “perdido la lucha”.
Dijo: “Cuando digo la lucha o el conflicto, al final todos los conflictos son políticos. Nuestro esfuerzo político allí se transformó en una campaña de 20 años para tomar un bando en una guerra civil, el bando que habíamos creado, y hacerlo triunfar cultural, económica, política y militarmente sobre el bando insurgente, que eran los talibanes. El problema era que los talibanes eran más fuertes”.
Sin embargo, la retirada estadounidense de Afganistán no debe verse como una indicación de las futuras políticas de Estados Unidos con respecto a sus aliados en Oriente Medio, dijo Jeffrey.
“Cualquier retirada estadounidense que hagamos de cualquier lugar produce escalofríos en un sistema de seguridad colectiva con muchos países que dependen de Estados Unidos”, reconoció, pero Afganistán “fue un caso muy especial tanto para Joe Biden como para Estados Unidos, y no creo que haya más retiradas. De hecho, no creo que haya intención de retirarse de ningún otro lugar”.