Los medios de comunicación turcos informaron el jueves de la captura de 15 individuos que espiaban para Israel en el marco de una operación masiva de las fuerzas de seguridad locales y la policía turca. Según los informes locales, 200 miembros de las fuerzas de seguridad turcas participaron en la serie de detenciones en las que participaron cinco células de espionaje diferentes, cada una de las cuales contaba con tres personas.
Según el diario turco Sabah, la operación se llevó a cabo el 7 de octubre, tras un año en el que se recopiló información de inteligencia sobre las actividades de los agentes.
Aunque los medios de comunicación turcos no revelaron de qué país procedían los espías, sí señalaron su apariencia de Oriente Medio. Según los informes, los agentes transfirieron información confidencial y documentos clasificados a la agencia de inteligencia Mossad.
Los agentes espiaban a altos cargos de Hamás y a estudiantes extranjeros de intercambio, según los informes.
Hace tres semanas, la Autoridad Palestina expresó su preocupación por la desaparición de siete palestinos en las ciudades turcas de Estambul y Konya, así como en la zona fronteriza entre Turquía y Grecia. Tres de los palestinos eran residentes de la Franja de Gaza y cuatro de Cisjordania.
El año pasado, el gobierno del presidente turco Recep Tayyip Erdogan reforzó su ya cálida relación con el grupo terrorista Hamás al conceder la ciudadanía turca a altos miembros de Hamás, según informó el periódico británico The Telegraph. La medida les permitiría viajar libremente y les permitiría planear ataques terroristas contra israelíes en todo el mundo.
Según el informe, siete de los 12 operativos de Hamás que utilizan Turquía como base de operaciones han recibido la ciudadanía turca, así como pasaportes, mientras que otros cinco están en proceso de recibirlos. En algunos casos, los terroristas de Hamás viven bajo alias turcos.
“No se trata de soldados de a pie, sino de los más altos operativos de Hamás fuera de Gaza. Están recaudando fondos activamente y dirigiendo a los agentes para que lleven a cabo atentados en la actualidad”, dijo una fuente de alto nivel en la región a The Telegraph.
“El Gobierno turco cedió a las presiones de Hamás para que concediera la ciudadanía a sus operativos, permitiéndoles así viajar más libremente, poniendo en peligro a otros países que han incluido a Hamás en la lista de grupos terroristas”, añadió la fuente.