Israel podría verse afectado por una reciente petición legal presentada en los tribunales de los Países Bajos. Abogados defensores de los derechos humanos buscan detener la exportación de piezas de aviones de combate F-35, que podrían ser utilizadas en operativos contra Gaza.
Estas organizaciones argumentan que la entrega de componentes para los F-35 implicaría la complicidad de los Países Bajos en posibles crímenes de guerra, en caso de ser utilizados por Israel en su lucha contra Hamás.
El objetivo es que el Tribunal de Distrito de La Haya emita una orden judicial que prohíba la salida de estas piezas, actualmente almacenadas en Woensdrecht. “El Estado debe detener inmediatamente la entrega de piezas del F-35 a Israel”, declaró la abogada Liesbeth Zegveld en el tribunal.
Gobierno neerlandés enfrenta presiones legales por exportaciones a Israel
Zegveld, citando documentos gubernamentales, sostiene que la aduana neerlandesa consultó al gobierno sobre la continuidad de las exportaciones tras el asalto del 7 de octubre perpetrado por Hamás, que desató la guerra entre Israel y Hamás.
La letrada argumentó que los intereses económicos y la reputación diplomática del Estado neerlandés parecen prevalecer sobre las advertencias de posibles violaciones a las leyes de guerra.
Por su parte, el abogado del gobierno, Reimer Veldhuis, instó al juez a rechazar la solicitud. Veldhuis argumentó que, incluso si se aceptaran los argumentos jurídicos de los defensores de los derechos y se prohibieran las exportaciones, EE. UU. suministraría estas piezas a Israel desde otro lugar.
Veldhuis añadió que Israel tiene derecho a la autodefensa. “Israel debe ser capaz de responder a las amenazas de la región. Eso debe ocurrir, por supuesto, dentro del marco del derecho internacional”, concluyó Veldhuis.