El escenario global de la supremacía aérea está experimentando un cambio significativo, marcado por el notable avance de China en la producción de cazas furtivos.
De acuerdo con el director del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS), con sede en Londres, el arsenal del J-20A, la joya de la aviación de combate china, está en vías de superar al emblemático F-22 Raptor de la Fuerza Aérea de Estados Unidos dentro del presente año.
Durante una presentación virtual del informe The Military Balance 2023, John Chipman, director general y CEO del IISS, expuso que la flota de cazas de China ha sufrido una transformación radical en el último lustro.
El inventario actual, que sobrepasa los 150 cazas J-20A, es testimonio de este cambio. Aunque Estados Unidos ha incrementado su flotilla de F-35A de quinta generación, alcanzando aproximadamente los 360 ejemplares, la velocidad a la que China está ampliando su capacidad de producción señala un punto de inflexión, según Chipman.
El ritmo sostenido de entrega de los J-20A está a punto de desbancar al F-22, otro caza de quinta generación de la aviación estadounidense, como el avión de combate dominante en términos numéricos. Esto marca un hito importante, dado que el F-22, introducido como el primer caza de quinta generación, ha sido largamente considerado como la punta de lanza de la tecnología aeronáutica militar de EE. UU.
La exportación de este avión se ha prohibido estrictamente para evitar que su avanzada tecnología caiga en manos extranjeras.
La producción del F-22 se detuvo debido a los altos costos asociados, llevando a Estados Unidos a orientar sus esfuerzos hacia los F-35, percibidos como más económicos y versátiles. A pesar de esto, se anticipa que el F-22 permanecerá en servicio activo hasta la década de 2030, asegurando la superioridad aérea de EE. UU.
El J-20, el primer caza de quinta generación de China, fue concebido como una directa competencia al F-22, simbolizando un desafío tangible a la hegemonía aérea estadounidense y marcando el inicio de una nueva era en la guerra aérea moderna.
Incremento presupuestario en defensa de China
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El reciente incremento del 7% en el presupuesto de defensa de China para el año 2022 se traduce en una inyección de aproximadamente 16.000 millones de dólares en el Ejército Popular de Liberación (EPL), marcando el mayor ascenso anual en términos de valor absoluto en su historia reciente.
Este aumento presupuestario está facilitando una acelerada modernización del EPL, según se ha informado, enfocándose en la expansión de su arsenal naval y estratégico, que ahora incluye portaaviones más sofisticados, fragatas, destructores y, de manera significativa, el desarrollo del misil balístico JL-3, lanzado desde submarinos y con un alcance extendido.
El JL-3 representa un salto cualitativo en la proyección de fuerza del EPL, permitiéndole potencialmente amenazar territorio estadounidense desde distancias previamente inalcanzables.
Este desarrollo, destacado en The Military Balance, podría mejorar la capacidad de supervivencia y efectividad disuasoria de la flota submarina china, otorgándole una flexibilidad estratégica sin precedentes.
Los análisis sugieren que, con un alcance superior al de sus predecesores JL-2, China podría operar sus submarinos de misiles balísticos desde el Mar de China Meridional, eliminando la necesidad de aventurarse en el Océano Pacífico para alcanzar objetivos en Estados Unidos.
En el contexto de la actual guerra en Ucrania, la situación ha enfatizado la crucial importancia de las reservas de armamento y la capacidad productiva de la industria de defensa. John Chipman resaltó cómo las exigencias inmediatas de equipamiento militar han impulsado a varios Estados europeos a diversificar sus fuentes de suministro más allá de los proveedores nacionales o habituales.
Un ejemplo claro de esta tendencia es Polonia, que ha distribuido sus órdenes de compra de tanques y sistemas de artillería de cohetes entre fabricantes de Estados Unidos y Corea del Sur, reflejando un patrón emergente de colaboración internacional en el ámbito de la defensa.
Corea del Sur se consolida en la industria de defensa en 2022
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El informe The Military Balance ha posicionado a Corea del Sur como el “éxito industrial más notable de la región en 2022”, destacando los acuerdos históricos con Polonia para el suministro de un arsenal significativo que incluye 1.000 carros de combate K2, 672 obuses autopropulsados K9 y 48 aviones de combate ligeros FA-50.
Estos contratos marcan el acuerdo de exportación de material de defensa más grande jamás logrado por un país asiático, resaltando el ascenso de Corea del Sur como una superpotencia en la industria de defensa global.
Además, la guerra en Ucrania ha catalizado un cambio en el panorama de la defensa europea, según indica John Chipman. El apoyo a Ucrania mediante el suministro de equipo de la era soviética ha acelerado la modernización de los arsenales de los países de Europa del Este, quienes ahora adoptan sistemas de fabricación occidental.
Esta dinámica no solo acelera la actualización de sus capacidades militares, sino que también fomenta una mayor uniformidad en el equipo defensivo a lo largo de Europa, fortaleciendo así la interoperabilidad entre sus fuerzas armadas.
Sin embargo, el escenario económico actual presenta desafíos considerables. Chipman apunta a la debilidad de las divisas, el lento crecimiento económico, las interrupciones continuas en las cadenas de suministro y el incremento de la inflación como factores que limitan la capacidad de los países para adquirir las capacidades de defensa que desean.
A pesar de un aumento nominal en el gasto global en defensa durante 2021 y 2022, la inflación ha reducido efectivamente este gasto en términos reales. Se estima que en 2022, la inflación restó aproximadamente 312.000 millones de dólares del gasto global en defensa.
En lo que respecta a India, The Military Balance señala que continúa el proceso de modernización de sus fuerzas armadas. Nueva Delhi está particularmente enfocado en fortalecer la infraestructura militar a lo largo de su frontera norte, demostrando un esfuerzo sostenido por parte de India para mejorar su postura de defensa ante los desafíos regionales y globales. Este esfuerzo subraya la importancia estratégica de la región y la necesidad de mantener un nivel adecuado de preparación militar frente a potenciales contingencias.
Desafíos en la modernización militar de India frente a la dependencia de Rusia
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En el año 2022, se intensificaron las preocupaciones respecto a la dependencia que India tiene de Rusia en términos de armamento y componentes, especialmente tras la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia.
A pesar de que India ha diversificado recientemente sus fuentes de adquisición de equipo militar, con una mayor inclinación hacia Estados Unidos y Francia, el informe destaca significativas dificultades logísticas dentro de las fuerzas convencionales indias, tales como la falta de municiones, piezas de repuesto, y personal calificado para el mantenimiento.
Esta situación subraya un desafío crítico en el proceso de modernización del ejército indio. Aunque el país sigue avanzando en la actualización de sus capacidades militares, numerosos proyectos de equipamiento enfrentan obstáculos significativos, incluyendo retrasos y excesos en los costos previstos, particularmente en aquellos sistemas desarrollados internamente.
Esta problemática pone de relieve la necesidad de India de superar las dificultades logísticas y de gestión de proyectos para asegurar una modernización efectiva y eficiente de su aparato militar, en un contexto de crecientes tensiones regionales y desafíos globales.