China demostró recientemente las capacidades de su nuevo sistema GL-6, diseñado para defender vehículos blindados contra amenazas avanzadas como misiles guiados, RPG y drones kamikaze.
El sistema GL-6 muestra avances significativos en tecnología de defensa
La televisión estatal china difundió imágenes de las pruebas del Sistema de Protección Activa (APS) GL-6. Este sistema protege vehículos blindados y tanques de China ante misiles guiados antitanque (ATGM), granadas propulsadas por cohetes (RPG) y drones kamikaze. Durante la demostración, el GL-6 interceptó proyectiles aéreos y horizontales, destacando su versatilidad al proteger desde múltiples ángulos.
El sistema logró interceptar simultáneamente dos proyectiles disparados desde diferentes direcciones, evidenciando su capacidad para enfrentar amenazas múltiples. Tras la neutralización de los ataques, el simulador de tanque mostró abolladuras no catastróficas en el blindaje. Aunque estos daños son leves, el GL-6 asegura que los componentes críticos del vehículo permanezcan operativos.
Este tipo de daños menores es similar a lo observado en el sistema israelí Trophy, que también deja marcas en el blindaje tras una interceptación exitosa. No obstante, ambos sistemas destacan por preservar la capacidad de combate del vehículo.
Características clave del GL-6 APS
- Capacidad para interceptar misiles y RPG desde distintos ángulos.
- Defensa contra múltiples amenazas de forma simultánea.
- Detección automática mediante sensores de radar, infrarrojos y ópticos.
- Protección de tanques avanzados como el Tipo 99 y el vehículo ZBL-09.
La defensa contra drones: un reto pendiente para el GL-6
Una limitación evidente en la prueba fue la ausencia de demostraciones contra drones kamikaze, una amenaza creciente en los campos de batalla modernos. En la guerra de Ucrania, ambos bandos han utilizado estos vehículos aéreos no tripulados (UAV) para ejecutar ataques selectivos. Los drones pueden volar a baja altura, eludiendo los sistemas tradicionales de defensa, lo que representa un desafío significativo para cualquier APS.
Aunque el GL-6 ha sido diseñado para manejar amenazas convencionales como misiles antitanque, su eficacia contra drones aún no se ha comprobado. Por su parte, los sensores avanzados del sistema permiten detectar proyectiles a gran distancia incluso en condiciones difíciles, como niebla o lluvia intensa. Sin embargo, su capacidad contra UAV requerirá una integración más avanzada con sistemas de guerra electrónica.
Comparativa con otros sistemas de protección activa
El sistema GL-6 compite con otros sistemas internacionales como el Trophy de Israel y el Arena de Rusia. El Trophy ha sido probado en combate, interceptando con éxito misiles Kornet en Gaza y Judea y Samaria. Arena, por su parte, protege tanques rusos T-90 y T-14 Armata, destacando por su velocidad para neutralizar múltiples amenazas.
Aunque el GL-6 es relativamente nuevo, representa un avance importante en la tecnología militar de China. Este desarrollo refuerza la estrategia del país para reducir su dependencia de tecnología extranjera y mejorar sus capacidades autóctonas. La industria de defensa china también ha hecho progresos significativos en la tecnología de misiles y drones, en línea con su objetivo de contrarrestar armas avanzadas.
El futuro de los sistemas de protección activa
El panorama de la guerra moderna obliga a que los sistemas APS evolucionen para hacer frente a drones y otros ataques simultáneos. En este sentido, el GL-6 podría beneficiarse de una integración con sistemas de contramedidas electrónicas para crear una defensa más completa.
Por ahora, el GL-6 es un sistema prometedor, aunque su eficacia deberá ser probada en combate real. Su capacidad de defender vehículos avanzados en escenarios complejos lo posiciona como una herramienta clave en la estrategia militar china para los próximos años.