La pandemia del coronavirus ha provocado un “salto cuántico” en la tecnología de los drones, tanto tecnológica como conceptualmente, ha dicho un líder de la industria.
La Autoridad de Aviación Civil de Israel aprobó en abril un vuelo de prueba de varios aviones no tripulados controlados por un solo operador simultáneamente sin el requisito de tener una línea de visión visual entre el operador y la aeronave. La empresa que está detrás del vuelo de prueba, Simplex, ha dicho que el éxito del vuelo, en el que operaron cuatro aviones teledirigidos de diferentes tipos simultáneamente, allanó el camino para múltiples usos, entre ellos el suministro de aviones no tripulados, la agricultura a distancia e incluso el traslado de suministros médicos como medicamentos, análisis de sangre, vacunas y productos sanguíneos.
La compañía está ahora avanzando en la concesión de licencias de su tecnología para entornos urbanos.
Entretanto, el Ministerio de Transporte de Israel ha publicado dos nuevas licitaciones para fomentar la investigación en este campo.
Simplex demostrará la tecnología en la Conferencia y Exposición de Sistemas No Tripulados y Robótica AUS&R 2020 el 6 de septiembre en la Expo Tel Aviv. Ya en su noveno año, la conferencia, auspiciada por iHLS (Seguridad Nacional de Israel), una nueva empresa de aceleradores especializada en el campo de la seguridad, se centrará en los sistemas no tripulados, incluidos los sistemas aéreos como los aviones no tripulados, los vehículos terrestres y los sistemas de vigilancia.
“La pandemia del COVID-19 ha provocado un salto cuántico tecnológico y conceptual en el uso de sistemas no tripulados en el aire y en tierra”, dijo el iHLS en un artículo en su sitio web. Añadió que las empresas que participan en la conferencia de este año “mostrarán un verdadero avance en un campo que ha ido ganando cada vez más impulso en Israel y en todo el mundo”.
Ofer Haruvi, VP de Desarrollo de Negocios de Simplex, y el presidente de la Conferencia de Sistemas No Tripulados de la iHLS, dijo que la pandemia del coronavirus aceleró tanto el desarrollo de la tecnología de los drones como la regulación de los mismos.
La innovación de Simplex ha consistido en desarrollar una “computadora de misión” aerotransportada, convirtiendo un dron estándar en un robot automatizado capaz de volar desde un lugar definido, viajar dentro de restricciones definidas y aterrizar de forma autónoma. Las restricciones incluyen no volar sobre zonas pobladas o puntos calientes de la población, y cartografiar un viaje para aprovechar las autopistas o las zonas abiertas.
La tecnología también tiene aplicaciones militares. La semana pasada, la Unidad 9900 de Israel abrió una nueva división de drones. La Unidad 9900 es responsable de reunir inteligencia visual y de mapear los datos para las tropas en el campo de batalla y para los que toman decisiones. “La unidad será un importante multiplicador de la capacidad de 9900 para proporcionar inteligencia geo-visual”, dijeron las FDI a The Jerusalén Post.
Shay Levy, el CEO de Simplex Interactive, dijo: “La tecnología que hemos demostrado es un verdadero avance en los vuelos no tripulados en Israel. La autorización otorgada por la Autoridad de Aviación Civil nos permitirá llevar a cabo pruebas de campo y demostrar que es posible utilizar los aviones teledirigidos en el entorno urbano para diversas misiones de manera eficiente y segura”.