La administración Biden ha prometido que 2023 será “el año más transformador” para las fuerzas estadounidenses en la región Indo-Pacífica. ¿Está Estados Unidos realmente preparado para enfrentar a China en esta área crucial?
Indo-Pacífico: Movimientos estratégicos recientes
Estados Unidos ha logrado varios avances en 2023, incluidos acuerdos con Japón, Filipinas y Australia. Entre ellos, destaca la decisión de mantener la 3ª División de Marines en Okinawa y la sustitución de esta división por el nuevo 12º Regimiento Litoral de Marines en 2025.
Además, la administración Biden ha propuesto un aumento de 400 millones de dólares en el presupuesto del Pentágono para la construcción militar en la región Indo-Pacífica.
A pesar de estos avances, se necesita una urgencia sostenida y una inversión sólida para superar el desfase de una década en la postura Indo-Pacífica y hacer frente a la creciente amenaza militar de China.
Estados Unidos: Diplomacia de defensa y colaboración
Estados Unidos debe aprovechar el impulso político reciente y trabajar con sus aliados, como Japón y Filipinas, para garantizar nuevos accesos a sus fuerzas y hacer que el uso compartido de bases, puertos y aeródromos sea la norma, no la excepción.
La inversión en una postura más distribuida y resistente es crucial, y se requiere más inversión en la segunda cadena de islas, Oceanía y el Sudeste Asiático.
Mover las fuerzas de manera efectiva también es fundamental para lograr un efecto “transformador” en la postura Indo-Pacífica.
Despliegue de fuerzas de vanguardia en el Indo-Pacífico
La administración Biden necesita desplegar sus cazas más avanzados, como los F-35A, en la base aérea japonesa de Misawa.
Además, se debe dar prioridad al acceso de la Multi-Domain Task Force (MDTF) en la diplomacia de defensa con Japón y estacionar submarinos de la clase Virginia en Guam y San Diego (California).
Finalmente, acelerar la inversión en la red logística, especialmente en el almacenamiento y distribución de combustible, es esencial para una disuasión creíble y una lucha eficaz.
El desafío de Estados Unidos en el Indo-Pacífico
La posición de fuerzas de Estados Unidos en el Indo-Pacífico se ha debilitado, lo que ha erosionado la disuasión frente a China.
Sin embargo, con una urgencia diplomática sostenida, una inversión robusta y capacidades más avanzadas, la postura de fuerzas de Estados Unidos puede transformarse para restaurar y preservar una disuasión creíble en el Indo-Pacífico.