Las Fuerzas Armadas de Rusia están perdiendo contratistas civiles debido a la falta de una compensación económica adecuada, según una carta enviada por el sindicato del personal civil de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia en la región de Siberia al primer ministro de la Federación de Rusia Mijaíl Mishustin.
En la carta, los empleados se quejan de los salarios extremadamente bajos y de los despidos masivos, y señalan que durante mucho tiempo no se llevó a cabo ninguna indexación.
No es el primer llamamiento de los sindicatos rusos sobre las consecuencias negativas de las sanciones internacionales para el complejo militar-industrial ruso. Anteriormente, los sindicatos de Arkhangelsk advirtieron de posibles disturbios sociales debido a la fuerte disminución de los salarios y del nivel de vida.
¿Cuál es la postura del sindicato ante la guerra?
Oficialmente, el sindicato apoya firmemente la invasión rusa de Ucrania, organizando diversos actos de propaganda. Sin embargo, el sindicato no reconoce la relación entre las sanciones impuestas debido a la guerra y la incapacidad del presupuesto militar para financiar su trabajo adecuadamente.
Una instalación rusa responsable de la producción de misiles tierra-aire (SAM) ha sido cerrada debido a las restricciones a la importación y a las sanciones occidentales. Esto se debe a que, como señalaron los empleados, no se utiliza “casi nada ruso” durante el estado crítico de la producción cuando se utilizan componentes electrónicos.
La mayor parte de los componentes electrónicos de los militares rusos eran suministrados por Alemania, pero con las sanciones en vigor, este país ya no suministra nada a Rusia.
Sin embargo, con las fábricas cerradas, los trabajadores tienen dos opciones: Tomar un permiso sin sueldo o alistarse en el ejército ruso para servir en la guerra con Ucrania, preferiblemente como operadores de SAM, y recibir un salario mensual de 50.000 rublos (unos 600 dólares).
A principios de abril, un astillero de Vladivostok fue supuestamente incapaz de cumplir con pedidos del gobierno por valor de 25.000 millones de rublos para construir dos petroleros, dos barcos de misiles y para mantener y reparar otros buques.
“Es evidente que el complejo militar-industrial ruso sigue dependiendo de las altas tecnologías importadas”, dijo el GUR de Ucrania. “Sin el suministro de las cuales Rusia es incapaz de continuar la producción de armas modernas”.