Las actualizaciones TR-3 y Block 4 del F-35C refuerzan su capacidad en guerra electrónica y amplían su arsenal con armas hipersónicas y de precisión.
TR-3 incrementa potencia computacional y fortalece defensa electrónica
En 2024, el Departamento de Defensa de Estados Unidos y Lockheed Martin comenzaron a entregar las primeras unidades del F-35C con la actualización Technology Refresh 3 (TR-3). Este avance, largamente esperado tras varios años de retrasos técnicos, representa un paso clave en el programa de modernización del caza. TR-3 eleva en un 37% su capacidad de procesamiento y en un 75% su memoria, lo que facilita la integración de sistemas más avanzados.
Con TR-3, el F-35C incorpora un nuevo núcleo de procesamiento, pantallas táctiles mejoradas y una arquitectura de software más eficiente. Estas mejoras sientan las bases para las capacidades futuras del Block 4, que será desplegado por fases hasta finales de la década. El sistema de guerra electrónica AN/ASQ-239 Barracuda, reforzado con estas actualizaciones, permite detectar, clasificar y contrarrestar amenazas con mayor precisión en entornos hostiles, como los escenarios A2/AD.
Datos clave sobre el TR-3 y Block 4 en el F-35C
- TR-3 aumenta en 37% el procesamiento y en 75% la memoria del F-35C.
- El sistema AN/ASQ-239 Barracuda mejora la defensa contra radares y misiles.
- Block 4 integrará el misil hipersónico AGM-183A ARRW y el misil JSM.
- Las actualizaciones permitirán operar en entornos de alta densidad electrónica.
- El sistema AN/ALQ-250 reemplaza el anterior sistema de contramedidas electrónicas.
Las entregas iniciales con TR-3, aceptadas por el Pentágono en julio de 2024, incluyen una configuración que mejora notablemente la infraestructura digital del avión. La combinación de estos avances permitirá a la plataforma cumplir misiones más exigentes en teatros navales de alta amenaza. Lockheed Martin destaca que esta capacidad es esencial para operar frente a defensas aéreas avanzadas.
TR-3 habilita el uso de nuevos sensores y armamento que serán introducidos en el Block 4. La arquitectura mejorada de software permite ejecutar de forma más eficiente los sistemas integrados, necesarios para mantener la ventaja táctica frente a adversarios como China y Rusia.
Block 4 introduce misiles hipersónicos y capacidades de ataque naval
Las capacidades del F-35C se ampliarán con el programa Block 4, que contempla la integración de armamento de última generación. Entre las novedades destaca la compatibilidad con el AGM-183A ARRW, un misil hipersónico lanzado desde el aire, diseñado para alcanzar objetivos prioritarios a velocidades superiores a Mach 5.
Además, el avión podrá emplear el Joint Strike Missile (JSM), desarrollado para ataques de precisión tanto sobre tierra como en el mar. Esta capacidad es relevante para la Marina de Estados Unidos, que requiere medios eficaces para neutralizar amenazas navales en regiones como el Indo-Pacífico. También se añadirá el sistema EOTS-Advanced para designación láser, que mejora la precisión de los ataques aire-tierra en condiciones climáticas adversas.
El sistema de contramedidas electrónicas AN/ALQ-250, parte de las mejoras del Block 4, reemplazará su versión anterior y proporcionará una protección superior frente a radares y misiles guiados por infrarrojos. Según un informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO) de 2024, este nuevo sistema permitirá al F-35C actuar eficazmente en escenarios donde las señales electrónicas son abundantes.
La optimización del sistema de fusión de sensores facilita la recopilación y análisis de datos de múltiples fuentes en tiempo real. Esta mejora incrementa la conciencia situacional del piloto, un componente vital en combates modernos donde el tiempo de reacción es crítico.
Desafíos técnicos y logísticos han marcado el desarrollo de TR-3 y Block 4
El proceso de implementación de TR-3 enfrentó varios obstáculos. Inicialmente previsto para completarse en 2020, sufrió retrasos debido a errores en el software y a limitaciones durante las pruebas de integración. En 2023, el Pentágono interrumpió temporalmente las entregas de nuevos F-35 para resolver estos problemas, lo que generó críticas por el aumento de costos del programa.
Un comunicado emitido por la Oficina del Programa Conjunto (JPO) en agosto de 2024 informó que los problemas principales de TR-3 ya habían sido solucionados. Gracias a ello, se autorizó la entrega de 75 unidades con esta configuración antes de finalizar el año. Por su parte, Block 4, con un presupuesto estimado de 16.500 millones de dólares hasta 2030, también enfrenta desafíos técnicos, particularmente en lo que respecta a la interoperabilidad de los nuevos sistemas.
El diseño por fases permite incorporar las mejoras sin interrumpir las operaciones actuales, aunque implica un esfuerzo logístico considerable para adaptar las unidades ya desplegadas. Esta estrategia asegura una transición operativa progresiva mientras se completan las capacidades avanzadas de Block 4.
El F-35C, desarrollado para operar desde portaaviones, representa un elemento clave en la estrategia naval estadounidense. Con 340 unidades planificadas para la Marina, estas mejoras responden a la necesidad de mantener la superioridad aérea frente a sistemas avanzados como el J-20 chino o los S-400 rusos.
Modernización busca mantener la superioridad tecnológica de EE. UU.
El programa de modernización del F-35C se implementa en un contexto de creciente exigencia tecnológica. Las capacidades iniciales de TR-3 ya se utilizan en entrenamientos y misiones de baja intensidad, mientras que las funciones completas del Block 4, incluyendo armas hipersónicas y sistemas de guerra electrónica de nueva generación, estarán operativas hacia 2029.
La interoperabilidad con aliados internacionales también mejora con estas actualizaciones. Países como Australia y Japón, que operan el F-35, se benefician del nuevo sistema que permite un intercambio de datos más eficiente durante operaciones conjuntas. Este aspecto fortalece la cohesión táctica entre fuerzas aliadas.
Con más de 1.000 unidades entregadas en todo el mundo hasta octubre de 2024, el F-35 constituye uno de los programas militares más costosos y complejos jamás desarrollados. La modernización actual reafirma el compromiso de Estados Unidos con la supremacía aeroespacial frente a amenazas emergentes.
A medida que se consolidan las entregas de TR-3 y avanza la implementación del Block 4, el F-35C se posiciona como una plataforma capaz de enfrentar desafíos avanzados tanto en entornos de guerra electrónica como en conflictos convencionales de alta intensidad.