Northrop Grumman espera que la Marina de EE. UU. seleccione un socio para el caza F/A-XX de sexta generación el próximo año.
Northrop Grumman anticipa decisiones clave para el caza F/A-XX
La directora ejecutiva de Northrop Grumman, Kathy Warden, anunció que se espera que la Marina de los EE. UU. seleccione un socio para su programa de cazas de sexta generación F/A-XX en 2025. Durante una conferencia telefónica sobre los resultados del segundo trimestre de 2024, Warden mencionó que la Armada estadounidense podría tomar la decisión formal sobre qué empresa construirá el avión, a pesar de la reducción de la financiación del programa.
El programa Next Generation Air Dominance (NGAD) de la Marina de los EE. UU., que no debe confundirse con el programa homónimo de la Fuerza Aérea, ha sido objeto de incertidumbre debido a los recortes presupuestarios para el año fiscal 2025. A pesar de esto, Warden expresó confianza en que el Departamento de Defensa avanzará con las plataformas de sexta generación, dependiendo de las prioridades presupuestarias.
El F/A-XX se desarrollará como reemplazo del F/A-18 Super Hornet, y se espera que incluya capacidades tanto tripuladas como no tripuladas, incluyendo armas láser y la capacidad de operar con enjambres de drones. Se prevé que el avión esté en servicio a mediados de la década de 2030, coincidiendo con el final de la producción del Block III del Super Hornet.
Expectativas sobre las capacidades del F/A-XX de sexta generación
El F/A-XX de la Marina de los EE. UU. se diseñará para operar desde portaaviones, lo que requerirá una estructura y tren de aterrizaje reforzados. Además, incluirá tecnologías avanzadas como armas de energía dirigida y sistemas de control de drones. Estas características permitirán al avión operar en entornos con fuertes defensas aéreas y establecer superioridad aérea mediante ataques de largo alcance.
Stavros Atlamazoglu, del National Interest, señaló que la Marina busca un avión capaz de operar en entornos permisivos y semipermisivos, con el objetivo de asegurar la superioridad aérea. La plataforma también deberá ser capaz de integrar nuevas tecnologías a medida que evolucionen las amenazas y las necesidades operativas.
El cronograma del proyecto no está completamente definido, pero se espera que el F/A-XX esté listo para reemplazar al F/A-18 Super Hornet, cuya producción finalizará en 2027. El desarrollo del F/A-XX es parte de un esfuerzo más amplio para mantener la competitividad de las capacidades aéreas de la Marina de los EE. UU.
Impacto de las decisiones presupuestarias en el futuro del F/A-XX
Los recortes de mil millones de dólares en la propuesta presupuestaria para el año fiscal 2025 han generado preocupación sobre el futuro del programa F/A-XX. Estos recortes se producen en un contexto de presión para reducir el gasto en defensa, lo que ha complicado la planificación a largo plazo de la Marina de los EE. UU.
Bill LaPlante, subsecretario de Defensa para Adquisiciones, manifestó optimismo sobre la resolución de estos desafíos durante un discurso en Farnborough. LaPlante subrayó que los programas de desarrollo de aviones de sexta generación continuarán, aunque con ajustes en sus objetivos originales.
A pesar de las incertidumbres, Northrop Grumman mantiene una posición fuerte, habiendo aumentado sus ventas en un 7% durante el segundo trimestre de 2024. La empresa confía en su capacidad para cumplir con las expectativas del Departamento de Defensa y está bien posicionada para competir en futuros contratos.
Northrop Grumman y su papel en el desarrollo del F/A-XX
Northrop Grumman no ha confirmado si competirá por el contrato del F/A-XX, aunque se retiró del programa NGAD de la Fuerza Aérea de EE. UU. el año pasado. Actualmente, Boeing y Lockheed Martin son los principales competidores en ese programa, produciendo el F/A-18 Super Hornet y el F-35 Lightning II, respectivamente.
Northrop Grumman sigue siendo un actor clave en el sector aeroespacial, como el contratista principal del B-21 Raider, el bombardero estratégico de largo alcance de la Fuerza Aérea de EE. UU. Además, la empresa suministra componentes para el F/A-18 y el F-35, consolidando su presencia en múltiples programas de defensa.
El rendimiento financiero de Northrop Grumman ha sido positivo, con un crecimiento de las ventas y un aumento en las ganancias netas. La empresa está enfocada en mantener su rentabilidad y satisfacer la demanda de sus productos y servicios, en medio de un entorno de defensa en constante cambio.