El mercado mundial de cazas crecerá de 47,34 mil millones en 2024 a 56,83 mil millones en 2029, liderado por Asia-Pacífico.
Expansión del mercado global alcanzará los 56,83 mil millones en 2029
Las proyecciones de Mordor Intelligence indican que el mercado global de aviones de combate alcanzará un valor de 47,34 mil millones de dólares en 2024, con un crecimiento anual compuesto del 3,72% hasta llegar a 56,83 mil millones en 2029. La región de Asia-Pacífico liderará este crecimiento, debido al incremento del gasto militar y los esfuerzos de modernización de flotas por parte de países como China, India, Japón y Corea del Sur.
Durante 2024, el mercado se mantiene en torno a los 47,27 mil millones de dólares, impulsado por fuertes inversiones regionales. China está desarrollando el J-20, un caza furtivo de quinta generación, y un nuevo modelo embarcado para sustituir al J-15. India planea adquirir 114 cazas por un valor de 18 mil millones de dólares y está desarrollando el AMCA, con primer vuelo previsto en 2025. Japón y Corea del Sur apuestan por modelos como el F-35 para reforzar sus capacidades de defensa.
El incremento de presupuestos militares, sobre todo en Asia-Pacífico, también influye en la expansión del mercado. Datos del SIPRI2,443 mil millones de dólares en 2023, con aumentos importantes en Asia y Oriente Medio. China destinó 293 mil millones en 2021 e India elevó su presupuesto en un 33% en la última década. La renovación de flotas, con cazas de 4.5 y quinta generación como el F-35, Su-57 y Rafale, responde a tensiones geopolíticas y disputas regionales.
Las tecnologías emergentes también fortalecen este crecimiento. Modelos como el F-35 Lightning II destacan por sus capacidades de integración de datos y operación en entornos hostiles. J-20 y Su-57 también buscan competir con tecnologías occidentales, pese a dificultades con los motores. Programas como el FCAS europeo y el NGAD estadounidense avanzan hacia la sexta generación con autonomía y tecnología hipersónica.
Datos clave sobre inversión y producción en Asia-Pacífico
- China desarrolla el J-20 y un nuevo caza embarcado para reemplazar al J-15.
- India planea invertir 18 mil millones de dólares en 114 cazas y desarrolla el AMCA.
- Corea del Sur impulsa el KF-21 Boramae junto a Indonesia.
- Japón y Corea del Sur adquieren el F-35 para enfrentar amenazas regionales.
Asia-Pacífico se posiciona como centro de producción aeronáutica
Las inversiones en fabricación local consolidan a Asia-Pacífico como un centro estratégico. China ha promovido el desarrollo nacional con AVIC como líder en la producción del J-20 y el JF-17. En India, HAL fabrica el Tejas y colabora con Dassault Aviation en la adquisición de 42 Rafale por 8.100 millones de dólares.
Indonesia ha encargado aviones Rafale y Airbus A400M, mientras que Corea del Sur avanza en el desarrollo del KF-21 Boramae junto a Indonesia. Estas acciones buscan reducir la dependencia de proveedores extranjeros y consolidar industrias de defensa soberanas.
Fuera de Asia, Estados Unidos domina por volumen de gasto, con 740,500 millones de dólares en 2020, liderando adquisiciones de modelos como el F-35 y F-15EX. En Europa, el 20% del mercado está en manos de países que apuestan por programas conjuntos y actualización de flotas.
En Oriente Medio, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos compran modelos como el F-15 y Rafale, reforzando su capacidad ante tensiones regionales.
Impacto de la pandemia y barreras tecnológicas en el mercado
La COVID-19 afectó negativamente al sector, con demoras en producción y logística. La complejidad y los altos costos de desarrollo de cazas de quinta y sexta generación llevaron a países como Canadá y Brasil a actualizar modelos como el F-16 y F/A-18 en lugar de adquirir nuevos.
Los riesgos vinculados a la ciberseguridad y la protección de propiedad intelectual también generan preocupación, ya que los sistemas digitales integrados en los aviones modernos almacenan información crítica de defensa.
El mercado se encuentra dominado por un número reducido de fabricantes como Lockheed Martin, Boeing, Airbus, Dassault Aviation, Saab AB y United Aircraft Corporation de Rusia.
Estas empresas compiten por penetrar mercados emergentes y establecer alianzas estratégicas. Ejemplo de ello es la colaboración entre Lockheed Martin y la India en torno al F-21 y el acuerdo entre Airbus y Tata Group para producir 40 aviones C295 en India.
Innovación y autonomía estratégica marcan el rumbo futuro
Factores económicos, tecnológicos y estratégicos configuran la evolución del mercado. Según el SIPRI, el gasto militar mundial creció un 2,7% en 2022, reforzando el enfoque en capacidades aéreas.
Con una flota de 14.529 aeronaves militares, incluidas 4.998 cazas, Asia-Pacífico lidera la demanda por su crecimiento económico y la necesidad de afrontar amenazas emergentes.
La apuesta por aviones avanzados y el desarrollo de capacidades industriales propias seguirá impulsando la expansión del sector, con énfasis en la innovación tecnológica y la autonomía estratégica.
La transición hacia modelos de sexta generación, junto a programas conjuntos y avances en inteligencia artificial y sistemas hipersónicos, marcarán la próxima etapa del mercado de aviones de combate.