ROMA – Italia ha vuelto a aumentar el gasto en defensa, ya que ha puesto en marcha el programa de cazas Tempest en 2022 y ha mejorado radicalmente su previsión de gasto total en el programa de sexta generación.
El presupuesto de 2022 recién publicado incluye 18.000 millones de euros (18.400 millones de dólares) en gastos del Ministerio de Defensa, por encima de los 16.800 millones de euros gastados en 2021, lo que a su vez supuso un aumento con respecto a años anteriores.
La parte del presupuesto dedicada a las adquisiciones asciende a 5.420 millones de euros, lo que supone un aumento del 34 % respecto a los 4.000 millones de euros gastados en 2021.
Una imagen real del gasto italiano en contratación pública debería incluir el complemento anual para la contratación nacional proporcionado por el Ministerio de Industria italiano, que asciende a 2.430 millones de euros, un ligero descenso con respecto a los 2.700 millones del año pasado.
El total de la contratación de este año asciende, pues, a 7.850 millones de euros, frente a los 6.760 millones del año pasado.
En su introducción al documento presupuestario, el ministro italiano de Defensa, Lorenzo Guerini, dijo que la invasión rusa de Ucrania hacía prioritaria la preparación para la guerra convencional.
“En este contexto, no puede haber dudas sobre la necesidad de seguir la senda del crecimiento del gasto en defensa”, escribió.
El documento preveía que la tendencia al alza del gasto en adquisiciones se detendría, sin embargo, el próximo año, con un desembolso total previsto de 6.180 millones de euros.
El documento calculaba que el gasto en defensa de este año, incluyendo el complemento del Ministerio de Industria y los fondos votados por separado para cubrir las misiones militares en el extranjero, asciende a 21.580 millones de euros.
Uno de los programas que se benefició de un gran impulso en la financiación fue el caza Tempest, que une a Italia con el Reino Unido y Suecia.
Tras prever el año pasado un gasto anual en 2022 y 2023 de 20 millones de euros cada año, el nuevo presupuesto compromete 220 millones de euros este año y prevé 345 millones de euros el próximo.
El año pasado, el documento presupuestario preveía un gasto global de 2.000 millones de euros en el programa; este año, los planificadores han revisado esa estimación a 3.800 millones de euros para 2036. El documento prevé que el año que viene comenzará a fluir el dinero para la adquisición de dos de los tres buques anfibios previstos para la Armada italiana, con un presupuesto previsto para el programa de 1.200 millones de euros para 2036.
También está creciendo el interés por un nuevo vehículo de combate sobre orugas que sustituya a los vehículos Dardo de Italia. El año pasado, el documento presupuestario decía que Italia esperaba gastar 2.140 millones de euros en el programa. Este año, la previsión ha aumentado a 3.740 millones de euros, con un gasto que se espera que comience en 2024 y dure 13 años después de que Italia decida los socios internacionales.
Otros gastos de este año incluyen 510 millones de euros en nuevos submarinos U-212NFS, 1.400 millones de euros en el programa Eurofighter y 1.270 millones de euros en el programa de adquisición de F-35 en curso en Italia.