El caza ruso Su-57 acaparó la atención en Aero India tras la cancelación de las demostraciones de vuelo del F-35 y F-16 por parte de EE. UU., generando especulación sobre las razones detrás de esta decisión.
La ausencia del F-35 da ventaja al Su-57 en Aero India
El Su-57 debutó con gran repercusión en Aero India, consolidándose como el único caza furtivo en exhibición tras la sorpresiva cancelación de las demostraciones del F-35 y el F-16 por parte de Estados Unidos. Esta decisión alimentó especulaciones sobre las razones de Washington para evitar la comparación directa con el caza ruso.
Rusia ha promovido al Su-57 como una alternativa viable al F-35, especialmente en mercados donde los controles estadounidenses sobre el uso y mantenimiento de armamento generan preocupación. Sin la presencia del caza estadounidense, Moscú logró proyectar su aeronave sin competencia en el evento.
Si bien el F-35 es superior en guerra en red y sigilo, ha sido criticado por su desempeño en combate cerrado. En contraste, el Su-57 destaca por su maniobrabilidad, gracias a sus motores de empuje vectorial 3D que le permiten ejecutar maniobras extremas a bajas velocidades.
No es la primera vez que aviones de combate estadounidenses evitan comparaciones directas con aeronaves rusas. Desde la era soviética, modelos como el Su-27, el MiG-29 y el Su-35 han sorprendido con su agilidad en espectáculos aéreos. En 2019, una demostración del Su-35 en Turquía evidenció las limitaciones del F-16, generando críticas hacia el desempeño del caza estadounidense.
Combates simulados y la maniobrabilidad del Su-57
Más allá de las exhibiciones, simulaciones de combate y ejercicios de entrenamiento han revelado que el F-35 puede verse en desventaja en duelos de corto alcance contra cazas supermaniobrables. Evaluaciones de inteligencia y testimonios de pilotos aliados sugieren que su principal fortaleza está en enfrentamientos a distancia, donde su tecnología de sigilo y sensores avanzados le otorgan ventaja.
El Su-57 ha sido probado en combate sobre Ucrania en funciones de ataque de largo alcance y guerra electrónica, pero su desempeño en combates aire-aire aún es objeto de análisis. La posibilidad de que el caza ruso supere al F-35 en combate cercano genera debate entre analistas.
En varios ejercicios de la OTAN, cazas de cuarta generación como el F-16 y el F/A-18 han demostrado ser más ágiles que el F-35 en enfrentamientos visuales. Dado que el Su-57 fue diseñado para superar en maniobrabilidad a sus predecesores, se especula que podría tener una ventaja significativa en combates a corta distancia.
Los pilotos rusos han sido entrenados para explotar la capacidad de vectorización de empuje de sus cazas, lo que les permite maniobrar con mayor agresividad. En escenarios donde el uso de misiles de largo alcance está restringido por reglas de combate, la agilidad del Su-57 podría marcar la diferencia.
India y su estrategia en la adquisición de cazas
India aún no ha tomado una decisión definitiva sobre su próximo caza de quinta generación. Aunque ha evaluado opciones occidentales y locales, la adquisición del F-35 conllevaría restricciones impuestas por Estados Unidos en su uso y mantenimiento.
El exmariscal del aire Anil Chopra señaló que la India desconfía de la tendencia de Washington a presionar a sus aliados en cuestiones militares. En este contexto, el Su-57 podría representar una alternativa más independiente.
El proceso de selección no solo depende del rendimiento técnico de los cazas, sino también de factores geopolíticos. Históricamente, la India ha equilibrado sus adquisiciones de defensa entre Rusia, Estados Unidos y Francia, con el fin de mantener autonomía estratégica.
Rusia ha sido el principal proveedor militar de la India, aunque en los últimos años Nueva Delhi ha intentado diversificar sus fuentes de armamento. Sin embargo, optar por el Su-57 podría generar tensiones con Estados Unidos, que busca reducir la influencia militar rusa en sus aliados.
Estados Unidos y su intento de atraer a India
El proyecto de caza de quinta generación de la India, el AMCA (Advanced Medium Combat Aircraft), aún está en desarrollo, dejando un vacío que el F-35 o el Su-57 podrían llenar. La decisión final dependerá de qué país ofrezca mejores condiciones en términos de transferencia de tecnología y autonomía operativa.
Washington ha intentado atraer a la India a su esfera militar-industrial, promoviendo modelos como el F-21 (una versión mejorada del F-16) y el F/A-18 Super Hornet. También ha insinuado la posibilidad de vender el F-35, aunque con estrictos controles sobre su uso.
Funcionarios indios han expresado preocupación por los acuerdos restrictivos que EE. UU. impone en sus ventas militares. Estos limitan la capacidad de modificación local y la flexibilidad operativa, aspectos clave para la India.
En contraste, el Su-57 ofrece menos restricciones políticas y un mayor potencial de colaboración tecnológica. Rusia ha mostrado mayor disposición a la producción bajo licencia y transferencia de tecnología en comparación con Estados Unidos.
Además, la India ya opera numerosos aviones de fabricación rusa, lo que haría más sencilla la integración del Su-57 en su infraestructura militar. Adoptar el F-35 implicaría un rediseño completo de los sistemas de entrenamiento, mantenimiento y compatibilidad, aumentando costos y tiempo de adaptación.
Razones estratégicas detrás del dominio del Su-57 en Aero India
- La cancelación de las demostraciones del F-35 y el F-16 dejó el camino libre para que el Su-57 se luciera en Aero India.
- El Su-57 es más ágil en combate aéreo cerrado, mientras que el F-35 depende de su tecnología furtiva y guerra en red.
- India evalúa opciones de cazas de quinta generación considerando no solo rendimiento técnico, sino también factores geopolíticos.
- Estados Unidos impone restricciones estrictas en sus ventas militares, mientras que Rusia ofrece más flexibilidad y transferencia de tecnología.
- La decisión de la India sobre su próximo caza podría redefinir sus alianzas estratégicas en el ámbito de la defensa.
La cancelación de la exhibición del F-35 en Aero India evitó una comparación directa con el Su-57, beneficiando a Rusia en su estrategia de promoción. Aunque la India aún no ha tomado una decisión, este evento refuerza el atractivo del caza ruso en el competitivo mercado de la aviación militar.