La Fuerza Aérea de la República de Corea, una rama del servicio de guerra aérea de Corea del Sur, ha publicado un nuevo vídeo publicitario en el que se muestra un caza furtivo F-35A atacando el último sistema de misiles de Corea del Norte.
El video de los nuevos anuncios incluye imágenes del ataque del F-35A al nuevo misil balístico intercontinental móvil Hwasong-14 desarrollado por Corea del Norte con sistemas de defensa aérea de corto alcance montados en camiones Pantsir-S1 de fabricación rusa y el sistema soviético Kvadrat.
El Hwasong-14 es el misil balístico intercontinental más avanzado de Corea del Norte, con un alcance de unos 10.000 kilómetros, capaz de alcanzar el territorio continental de Estados Unidos.
Según Missile Threat, si se tiene en cuenta la rotación de la Tierra, que proporciona un aumento del alcance cuando se viaja hacia el este, el área de cobertura de la Hwasong-14 incluiría la Costa Oeste, Chicago, y posiblemente incluso Nueva York. Las declaraciones de la prensa norcoreana afirmaban que el misil podía “golpear en cualquier parte del mundo”.
En cuanto al F-35A, este caza furtivo es un componente clave del llamado programa de ataque preventivo Kill-Chain de Corea del Sur, que forma parte de la estrategia de Corea del Sur para disuadir la acción militar norcoreana.
Los dos primeros F-35A llegaron a Corea del Sur en marzo de este año. Corea del Sur también está considerando la posibilidad de hacer un pedido de seguimiento de 20 F-35A a DAPA que, según se informa, ya ha iniciado su adquisición. Corea del Norte clasifica el F-35A como un “activo estratégico” para el Sur.
El paquete de sensores avanzados del F-35A reúne y distribuye más información que cualquier otro luchador en la historia, dando a los operadores una ventaja decisiva sobre todos los adversarios. Su tremendo poder de procesamiento, arquitectura abierta, sensores sofisticados, fusión de información y enlaces de comunicación flexibles hacen que el F-35 sea una herramienta indispensable en la futura defensa de la patria, la guerra irregular conjunta y de coalición y las principales operaciones de combate.
La década de 1970 vio la producción de muchos de los aviones de hoy que comprenden la mayor parte del inventario de aviones tácticos de los Estados Unidos. La combinación del agotamiento de la vida útil y las crecientes amenazas requerirá que todos los servicios retiren lentamente su avión táctico actual. Estos problemas no se limitan a los Estados Unidos. La Royal Air Force y Royal Navy Harriers subrayan problemas similares. Otros aliados de los Estados Unidos están teniendo el mismo problema.