En un contrato de 600 millones de dólares australianos, Boeing amplía su apoyo técnico a los F/A-18F y EA-18G de la RAAF hasta 2030.
Boeing asegura contrato millonario para el mantenimiento de F/A-18F y EA-18G
En un hito que reafirma la colaboración entre Boeing y la Real Fuerza Aérea Australiana (RAAF), se ha formalizado una extensión contractual valorada en 600 millones de dólares australianos. Este convenio quinquenal autoriza a Boeing a continuar ofreciendo soporte técnico a los cazas F/A-18F Super Hornet y EA-18G Growlers de la RAAF. Dicha extensión, la segunda de su naturaleza, eleva el valor total del contrato de soporte a una cifra significativa de 1.200 millones de dólares australianos.
El Ministro de Industria de Defensa, Pat Conroy, fue el encargado de anunciar este acuerdo, que se prolongará hasta el año 2030. A pesar de que los pormenores del plan de modernización no han sido completamente revelados, Conroy insinuó que Boeing mantendrá una función crucial en el “mantenimiento y modernización” de ambos escuadrones. Por su parte, Scott Carpendale, Vicepresidente y Director General de Boeing Defence Australia, destacó la importancia de la relación laboral establecida con la Commonwealth de Australia, la RAAF y la industria australiana en el fortalecimiento de las capacidades de combate aéreo y ataque electrónico de la nación.
Desde la instauración del servicio de mantenimiento para el Super Hornet en 2010 y para el Growler en 2017, Boeing ha demostrado un compromiso firme en satisfacer las necesidades operativas de estas aeronaves, así como en la implementación de actualizaciones relevantes a la flota. El Ministro Conroy enfatizó la relevancia de mantener una flota aérea de vanguardia y una mano de obra cualificada, particularmente en el contexto de crecientes tensiones internacionales, subrayando cómo este acuerdo potencia la capacidad de Australia para afrontar amenazas emergentes.
El Escuadrón n.º 1 y n.º 6 de la RAAF: Pilares en la defensa aérea australiana
La Real Fuerza Aérea Australiana cuenta con el Escuadrón n.º 1, encargado de la supervisión de 24 cazas F/A-18F Super Hornet. Por otro lado, el Escuadrón n.º 6, ubicado en la Base Amberley de la RAAF, se encarga de gestionar la flota de Growler. Este último, compuesto por 12 aeronaves EA-18G, se distingue por estar equipado con el avanzado Sistema Táctico de Interferencias ALQ-99 y una serie de misiles antirradiación AGM-88, consolidando así una capacidad robusta de Ataque Electrónico Aerotransportado.
Aunque los detalles específicos del proyecto de modernización mencionado por Conroy y Boeing permanecen en cierta medida inciertos, se sabe que en el Salón Aeronáutico de Avalon de 2023, Boeing discutió con el gobierno de Canberra la posibilidad de actualizar los Super Hornets al estándar Bloque III. Esta actualización, ya adoptada por la flota de Super Hornets de la Marina de los EE. UU., es fundamental para mejorar las capacidades de procesamiento de datos del avión, integrándolo en una amplia red de “asesinato” que sincroniza múltiples activos de combate.
Avances significativos en el diseño y operatividad del Bloque III del Super Hornet
El rediseño de los Super Hornets Block III se centra en operaciones de alta exigencia, buscando un balance entre costo operativo y mínima necesidad de equipos de apoyo, sin sacrificar la preparación para la misión. Esta versión contrasta notablemente con el modelo Block II, especialmente en la cabina. El Bloque III introduce un sistema avanzado de cabina con una pantalla táctil de 10.1 pulgadas, personalizable, facilitando al piloto un acceso más directo y claro a la información crítica y una mejor percepción del espacio de batalla.
En el ámbito de la recopilación y distribución de datos, el Bloque III incluye el enlace de datos TTNT (Tactical Targeting Network Technology), diseñado para mejorar significativamente la eficacia en la difusión de la información. Respecto a la longevidad operativa, el Bloque III supera a su predecesor con un 66% más de vida útil, equivalente a 10,000 horas de vuelo, en comparación con las 6,000 horas del Bloque II.
El contrato renovado impulsa mejoras significativas en el EA-18G Growler
El acuerdo renovado para el EA-18G Growler no solo asegura la continuación de sus funcionalidades actuales, sino que también establece las bases para futuras actualizaciones en el marco del proyecto AIR 5349 Fase 6, conocido como Advanced Growler. Este proyecto es clave para lograr un EA-18G común y completamente funcional e interoperable con la Marina de los EE. UU., crucial para el éxito de las operaciones de Ataque Electrónico Aerotransportado (AEA).
Entre las mejoras previstas, destaca el desarrollo conjunto con Estados Unidos del sistema Jammer de nueva generación, destinado a reemplazar progresivamente el actual sistema AN/ALQ-99. Este esfuerzo conjunto busca lograr avances significativos en las capacidades de guerra electrónica. Las modificaciones se centran en mejorar los sensores de las aeronaves, lo que incrementa considerablemente su rendimiento operativo.
Además, el proyecto incluye la actualización del arsenal de misiles antirradiación y la introducción de misiles de mayor alcance y tecnología avanzada. Estas mejoras no solo refuerzan la capacidad ofensiva del Growler, sino que también amplían su espectro de operaciones en escenarios de guerra electrónica.
La actualización del Bloque III en los F/A-18F Super Hornets incluye mejoras en la cabina con sistemas avanzados de pantalla táctil, el enlace de datos TTNT para una mejor distribución de información, y un aumento en la vida útil de las aeronaves hasta 10,000 horas de vuelo, mejorando así sus capacidades operativas y estratégicas.
El contrato de Boeing con la RAAF hasta 2030 asegura un soporte técnico continuo para los F/A-18F Super Hornets. Este apoyo es crucial para mantener las aeronaves en su máximo rendimiento operativo y garantizar su actualización constante, lo que es esencial en un contexto de crecientes desafíos de seguridad.
El F/A-18F Super Hornet es un caza multirol que destaca por su versatilidad en combate aéreo y misiones de ataque. Equipado con avanzados sistemas de armamento y sensores, es capaz de realizar operaciones tanto en misiones de día como de noche, en cualquier condición meteorológica.
El F/A-18F Super Hornet es crucial para la defensa aérea de Australia, proporcionando una capacidad robusta tanto en combate aéreo como en misiones de ataque. Su versatilidad y las recientes actualizaciones lo hacen una pieza clave en la estrategia de seguridad nacional australiana.
La colaboración entre Boeing y la RAAF se centra en el soporte técnico y la modernización de los F/A-18F Super Hornets. Boeing proporciona mantenimiento, actualizaciones técnicas y soporte operativo, lo que asegura que la flota mantenga su eficacia y esté preparada para enfrentar desafíos futuros.