La Fuerza Aérea Rusa incorpora interceptores MiG-31BM, aumentando su capacidad defensiva y ofensiva en medio de su guerra en Ucrania.
Primer lote de MiG-31BM modernizados entregados a la Fuerza Aérea Rusa
El primer lote de aviones interceptores supersónicos Mikoyan MiG-31BM modernizados fue oficialmente incorporado por la Fuerza Aérea Rusa (VVS), que forma parte de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas (VKS). Este anuncio fue realizado por la United Aircraft Corporation (UAC) el 15 de julio, marcando la entrega inicial de este modelo de interceptor para el año 2024.
En un comunicado de prensa, la UAC informó: “El equipo de aviación fue entregado conforme a las obligaciones impuestas por la orden de defensa estatal. Después de completar una serie de pruebas en tierra y en vuelo que confirmaron los requisitos establecidos, los aviones fueron trasladados a sus bases permanentes. Los MiG-31 modernizados poseen altas características de combate y son capaces de cumplir con éxito sus misiones en condiciones modernas”.
Rusia ha desplegado activamente estos interceptores en la guerra con Ucrania. A finales del año pasado, Moscú realizó una maniobra estratégica al posicionar sus MiG-31 en Crimea por primera vez. Analistas ucranianos indican que este movimiento tiene como objetivo apoyar la estrategia del presidente Putin de mantener patrullas casi constantes sobre el mar Negro, lo cual representa una amenaza significativa para Ucrania debido a los misiles Dagger.
Equipamiento y capacidades del MiG-31BM en conflictos modernos
Equipados para transportar misiles hipersónicos Kinzhal (Dagger), estos aviones patrullan el mar Negro con la intención, según fuentes rusas, de “neutralizar los misiles HIMARS ucranianos”. Sin embargo, ¿es esta su única finalidad?
El MiG-31 viene en dos configuraciones: el MiG-31K, que actúa como portaaviones del misil ruso Dagger, y el MiG-31BM, un interceptor armado con misiles aire-aire R-37M. El modelo MiG-31BM puede atacar amenazas aéreas a una distancia de hasta 300 kilómetros. Esto implica que Rusia utiliza el MiG-31 no solo para operaciones ofensivas contra Ucrania, sino también para proteger sus propios activos militares de misiles ucranianos como Neptune, Storm Shadow/SCALP y ATACMS.
Cada vez que un MiG-31 despega, se activa una alerta aérea en toda Ucrania, según informan canales de Telegram que monitorean la situación. Esta táctica tiene el propósito de aumentar las tensiones y mantener a los ucranianos en un estado de alerta constante ante la amenaza del misil Kinzhal.
Características técnicas y operativas del MiG-31BM
Desarrollado por la oficina de diseño Mikoyan, el MiG-31BM es una versión avanzada del MiG-31, un avión interceptor supersónico diseñado para interceptar y destruir objetivos aéreos a gran velocidad y altitud, lo que lo convierte en un elemento esencial para las capacidades de defensa aérea de Rusia.
Este avión tiene unas dimensiones impresionantes: 22,69 metros de longitud, 13,46 metros de envergadura y 6,15 metros de altura, lo que contribuye a su notable presencia y eficiencia aerodinámica. Propulsado por dos motores turbofán con postcombustión Soloviev D-30F6, el MiG-31BM cuenta con el empuje necesario para alcanzar su alta velocidad y capacidades operativas.
En términos de aviónica, el MiG-31BM está equipado con avanzados sistemas de radar, incluyendo el radar de matriz en fase Zaslon-M, que permite la detección y seguimiento simultáneo de múltiples objetivos. Además, cuenta con sistemas de navegación y comunicación modernizados, mejorando su eficacia operativa.
Altitud y velocidad de operación del MiG-31BM
La capacidad de volar a una altitud máxima de unos 20.600 metros [67.600 pies] permite al MiG-31BM operar por encima de la mayoría de los aviones comerciales y militares, esencial para su función como interceptor.
Capaz de alcanzar una velocidad de crucero máxima de aproximadamente Mach 2,83 (unos 3.000 kilómetros por hora o 1.864 millas por hora), el MiG-31BM puede reaccionar rápidamente ante posibles amenazas y cubrir grandes distancias en poco tiempo.
El armamento del MiG-31BM incluye una variedad de misiles aire-aire de largo alcance como el R-33, R-37 y R-77. El misil R-37, con un alcance de hasta 400 kilómetros [aproximadamente 248 millas], permite al MiG-31BM neutralizar amenazas antes de que puedan representar un peligro para el espacio aéreo protegido.