El ejercicio Neptune Strike 23-3, ejecutado por la OTAN, fortalece la defensa Aliada con actividades de vigilancia.
Ejercicio Neptune Strike 23-3: La OTAN en Defensa de la Soberanía
La OTAN ha puesto en marcha el Neptune Strike 23-3 bajo la dirección de las Fuerzas Navales de Ataque y Apoyo de la OTAN (STRIKFORNATO). Esta operación se desarrollará hasta el 10 de noviembre. Veinte países miembros y un aliado participan en esta misión, que busca afianzar el compromiso de la Alianza con los principios de soberanía y libertad.
Esta tercera edición de Neptune Strike en el año subraya la capacidad de respuesta y el poderío de la OTAN en escenarios de combate multidominio. Las maniobras tienen como objetivo evidenciar la evolución y la habilidad de la Alianza para incorporar grupos de ataque de portaaviones en la guerra marítima de alta gama.
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Las Actividades de Vigilancia Mejoradas (eVAs) son ya parte de la rutina del personal de combate de STRIKFORNATO, extendiendo su influencia a través de dominios marítimos, aéreos y terrestres, y contribuyendo a la seguridad y disuasión general.
Disuasión y Defensa: Los Pilares de STRIKFORNATO en el Mediterráneo y Más Allá
Durante la iniciativa Neptune Strike 23-3, las fuerzas de STRIKFORNATO abarcarán desde el Mediterráneo Central hasta las aguas del mar Negro y el mar Báltico. La demostración de fuerza destaca la combinación de sistemas de armamento avanzado y las fuerzas entrenadas de los aliados, centrándose especialmente en las capacidades de Ataque Marítimo europeas.
En un contexto de competencia internacional, la principal misión de la Alianza es garantizar la protección de su territorio y población frente a cualquier amenaza, independientemente de su origen. Neptune Strike 23-3 busca evidenciar la solidez del compromiso de los países miembros de la OTAN con esta fundamental tarea.
El compromiso de la OTAN con la soberanía y la libertad se mantendrá inalterable durante el desarrollo del Neptune Strike 23-3, reafirmando la determinación de la Alianza en cumplir con su deber.