Las autoridades indonesias han decidido no seguir adelante con la compra de cazas rusos, informó el periódico indonesio Nasional Kompas con referencia al jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea de Indonesia, Fadjar Prasetyo.
“Con gran pesar, tenemos que cancelar los planes de compra de cazas Su-35, porque, como dijimos inicialmente, el desarrollo del poder militar depende de los fondos presupuestarios”, dijo Fadjar Prasetyo en un comunicado.
Indonesia firmó un contrato para el suministro de 11 aviones por valor de 1.140 millones de dólares con Rusia en febrero de 2018. Sin embargo, seis meses después, aparecieron informes sobre problemas en la ejecución del contrato. Debido a la ley estadounidense “Sobre la lucha contra los adversarios de Estados Unidos a través de la acción”, tanto los compradores como los vendedores podrían caer bajo las llamadas “sanciones secundarias” debido a las transacciones con el exportador de armas ruso Rosoboronexport, que ya estaba bajo sanciones estadounidenses.
Para eludir la prohibición, las partes acordaron que Indonesia pagaría la mitad del importe de la entrega de los aviones en forma de trueque. Se esperaba que los aviones de combate se intercambiaran por lotes de aceite de palma y migas de caucho.
Pero el contrato no llegó a buen puerto ni siquiera en esas condiciones, y ahora Indonesia se plantea comprar cazas Rafale franceses y Boeing F-15 EX estadounidenses.
Según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), publicado a principios de diciembre, las exportaciones de armas rusas llevan tres años consecutivos de descenso. Los analistas lo atribuyen al hecho de que varios nuevos Estados exportadores de armas, en particular China e Israel, están entrando en el mercado mundial.