La Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón (JASDF, por sus siglas en inglés) anunció la llegada de sus tres primeros cazas F-35B Lightning II STOVL (despegue corto y aterrizaje vertical) a la Base Aérea de Nyutabaru el 7 de agosto de 2025. El ministerio de Defensa japonés había informado pocos días antes sobre la llegada inminente de los cazas, que fueron avistados aterrizando en la Base Conjunta Pearl Harbor-Hickam (JBPHH), en Hawái, el 1 de agosto.
Según lo comunicado inicialmente por el Ministerio, se esperaba la llegada de cuatro aeronaves. Sin embargo, uno de los F-35 permaneció en Estados Unidos y será trasladado posteriormente. Además, el ministerio de Defensa informó que se entregarán cuatro F-35B adicionales a Nyutabaru antes de finalizar marzo de 2026.
Japón había anunciado previamente en enero de 2025 que la llegada de los primeros F-35B, originalmente prevista para el año fiscal 2024 (que concluye el 31 de marzo de 2025), se posponía al año fiscal 2025. Durante dicho periodo, que culmina en marzo de 2026, está prevista la entrega de un total de ocho aeronaves.
Pilotos estadounidenses realizarán vuelos de demostración en Nyutabaru en septiembre de 2025 con el objetivo de mitigar las preocupaciones de los residentes locales por el ruido generado durante los aterrizajes verticales. Se está construyendo una base aérea específicamente diseñada para este tipo de aterrizajes del F-35B en la isla deshabitada de Mageshima, ubicada a 160 kilómetros al sur de Nyutabaru, cuya finalización se prevé para el año 2030.
El ruido asociado a los aterrizajes verticales ha sido motivo de especial preocupación para la población local. Ante ello, el ministerio de Defensa está realizando una evaluación y ha entablado contacto con los habitantes de la zona para mantenerlos informados. La JASDF dará inicio al entrenamiento con F-35B en ese lugar solo una vez que se presenten públicamente los resultados de dicha evaluación.
“Por medio de la demostración aérea, ofreceremos a los residentes la posibilidad de experimentar directamente las características acústicas del F-35B, tras lo cual el ministerio de Defensa explicará los resultados de su evaluación a la comunidad local”, declaró la cartera de Defensa.
Aunque están asignados a la JASDF, los F-35B operarán a bordo de los buques JS Izumo y JS Kaga de la Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón (JMSDF). Ambos portaaviones, clasificados localmente como destructores portahelicópteros (DDH), se encuentran actualmente en proceso de modificación para permitir operaciones con los F-35B.
La JASDF también opera aproximadamente 40 cazas F-35A CTOL (despegue y aterrizaje convencionales), y está previsto alcanzar una flota total de 105 unidades. Con la incorporación de los 42 F-35B, Japón operará un total de 147 cazas de quinta generación, lo que convertirá al país en el mayor operador del F-35 fuera de Estados Unidos.
En relación con la adquisición de los F-35B, Japón, que en un inicio solo había adquirido F-35A, decidió en 2018 incorporar 42 F-35B con el fin de reforzar sus capacidades operativas desde portaaviones, pistas cortas e islas remotas. Estas 42 unidades forman parte del total de 147 F-35 que Japón tiene previsto operar.
El plan recibió aprobación formal en el Programa de Defensa a Medio Plazo 2019–2023 de Japón, que contemplaba inicialmente que 18 de los 47 F-35 proyectados serían de la variante STOVL. Posteriormente, el programa de adquisición se amplió a 42 F-35B.
Estados Unidos aprobó la venta en 2020, que incluía 63 F-35A y 42 F-35B, totalizando 105 aeronaves. Según lo informado por la Agencia de Cooperación en Seguridad de Defensa (DSCA) al Congreso estadounidense, la operación fue valorada en aproximadamente $23.110 millones.
Con 147 aeronaves en servicio, Japón se convertirá en el segundo mayor operador del F-35 a nivel mundial, solo por detrás de Estados Unidos. Asimismo, el país alberga en Nagoya una de las tres instalaciones mundiales de montaje final y verificación (FACO) del programa F-35 Lightning II.
No obstante, los F-35B destinados a Japón serán fabricados en Estados Unidos, en las instalaciones de Lockheed Martin ubicadas en Fort Worth, Texas. La planta FACO en Nagoya continúa encargándose del ensamblaje final y la verificación de los F-35A que se entregan a la JASDF, así como de las labores de mantenimiento, reparación, revisión y modernización (MRO\&U) para la región del noreste de Asia.
En cuanto al servicio operativo del F-35B en Japón, se prevé que estos cazas STOVL operen desde los dos destructores portahelicópteros de la clase Izumo de la JMSDF: el JS Izumo y el JS Kaga, que están siendo modificados para este fin. Para facilitar la integración de las nuevas aeronaves, Japón está estudiando las operaciones con F-35B llevadas a cabo por otras armadas que ya utilizan esta variante, como la Marina italiana y la Real Marina británica.
El F-35B ha sido sometido a pruebas con buques japoneses en dos ocasiones: el Izumo efectuó operaciones de vuelo en 2021, mientras que el Kaga recibió recientemente un aterrizaje de prueba de un F-35B en su cubierta. En ambos casos, se utilizaron aeronaves y pilotos no japoneses. Se prevé que el Izumo comience operaciones con F-35B en 2027, y que el Kaga los incorpore en 2028.
Pese a que operarán desde los buques de la JMSDF, los F-35B estarán bajo control operacional de la JASDF. Esta tiene previsto operar hasta 105 F-35A CTOL y 42 F-35B V/STOVL, en paralelo con su flota actual de cazas F-15J/DJ y F-2A/B.
El primer grupo de F-35B será destinado a la Base Aérea de Nyutabaru, ubicada en el sur de la isla de Kyushu, debido a su cercanía con el puerto base del JS Kaga, perteneciente a la JMSDF y localizado en Kure, prefectura de Hiroshima. Se ha constituido un escuadrón provisional como parte de los preparativos para la incorporación del F-35B en Nyutabaru.