El V-22 Osprey se distingue como un modelo excepcional dentro de la flota de aviones militares de Estados Unidos, siendo el único en su categoría de rotor basculante de gran tamaño que se encuentra actualmente en servicio activo. Sin embargo, pronto se sumará a esta singularidad el nuevo Bell V-280 Valor, que estará al servicio del ejército.
Este versátil avión es utilizado por la Fuerza Aérea, la Armada y el Cuerpo de Marines, quienes aprovechan sus diversas capacidades. Una de las características más destacadas del Osprey es su habilidad para realizar reabastecimiento en vuelo, particularmente en el caso de los modelos utilizados por los Marines estadounidenses.
En septiembre de 2013, Boeing emitió un comunicado donde informaba sobre el éxito de una prueba inicial del V-22 Osprey en su función como avión cisterna para reabastecimiento aéreo.

La demostración tuvo lugar en el norte de Texas y se llevó a cabo con un V-22 Osprey que estaba equipado con un prototipo de sistema de reabastecimiento en vuelo. En este evento, se observó que el sistema “se desplegó de forma segura, se mantuvo estable y retrajo el contenedor de reabastecimiento mientras un F/A-18C y un F/A-18D Hornet volaban justo detrás y al costado del avión”.
Esa prueba de Boeing se realizó hace más de diez años, y desde entonces, los Osprey han estado desempeñando la función de reabastecimiento de aviones. Este modelo es capaz de suministrar combustible a todos los aviones que poseen la capacidad de reabastecimiento aéreo dentro de la Fuerza de Tareas Aérea y Terrestre del Cuerpo de Marines, con la capacidad de transferir aproximadamente 10,000 libras de combustible por cada V-22 que cuenta con el sistema VARS.
Aviones del Cuerpo de Marines: Capacidades y reabastecimiento aéreo

El Cuerpo de Marines opera diversos aviones, entre los cuales se encuentran:
- McDonnell Douglas AV-8B Harrier II: 87 unidades (próximamente será retirado).
- F/A-18A/C/D: 186 unidades.
- F-35B/C: 142 unidades.
- Aviones cisterna KC-130J: 69 unidades.
- Ospreys MV-22: 288 unidades.
Según un artículo de National Interest publicado en enero de 2022, el V-22 Osprey podría desempeñar un papel crucial como recurso para el reabastecimiento aéreo de los aviones de combate F-35B de la Marina, que realizan operaciones desde buques anfibios. Si los V-22 son capaces de reabastecer a estos aviones, los F-35B podrían extender su alcance de vuelo significativamente, hasta un total de 1,600 kilómetros. Esto permitiría a los F-35B alcanzar objetivos a distancias que duplican el rango de aquellos que no reciben reabastecimiento.
Aunque los Marines han decidido equipar sus V-22 con kits de reabastecimiento de combustible, la Armada no muestra interés en adquirir estos kits para sus propios Ospreys. Los Marines utilizan múltiples unidades de rotor basculante Osprey desde buques de asalto anfibio y portaaviones. En este contexto, los buques de asalto anfibio pueden transportar hasta 12 aviones de rotor basculante Osprey. Cabe mencionar que el nuevo avión no tripulado cisterna MQ-25 Stingray de Boeing no opera desde los buques de asalto anfibio del Cuerpo de Marines.
Adicionalmente, los Marines han implementado un Sistema de Reabastecimiento Aéreo V-22 (VARS) que permite a este modelo apoyar a diversas aeronaves de ala fija, como el Boeing F/A-18 Super Hornet y el F-35C, así como a helicópteros, incluyendo el Sikorsky CH-53 Sea Stallion.
Debilidades del V-22 Osprey según el Instituto Naval de EE. UU.

El Instituto Naval de Estados Unidos destaca que, a pesar de su función como avión cisterna, el V-22 Osprey presenta una notable vulnerabilidad. En el contexto de una posible guerra con China, se anticipa que este país sería un adversario de igual a igual para Estados Unidos, lo que obligaría a este último a enfrentar los desafíos de la distancia en el combate.
Uno de los principales retos que enfrentaría Estados Unidos sería asegurar el reabastecimiento de combustible para sus aviones mientras operan a largas distancias. Según el Instituto Naval, la mayor debilidad del V-22 radica en su incapacidad para sobrevivir en entornos disputados; en este sentido, su uso se limitaría a situaciones no contestadas o como un avión cisterna de recuperación.
Para abordar esta limitación, el Instituto Naval de los Estados Unidos sugiere que los Marines consideren la adquisición de una versión del MQ-25 que podría operar desde sus plataformas.
“El Cuerpo de Marines está planeando introducir una versión de reabastecimiento aéreo de su OV-22 Osprey a bordo de los grandes buques de asalto anfibio (LHD y LHA) de la Armada para aumentar el alcance de los elementos de aviación orgánicos (por ejemplo, el F-35B). Sin embargo, al igual que el KC-130J, un avión cisterna basado en Osprey no es capaz de sobrevivir en los escenarios proyectados. Solo podría sobrevivir en un entorno no disputado o usarse únicamente como un avión cisterna de recuperación”, indicó el Instituto Naval de EE. UU.
La logística, clave en la guerra moderna

En el ámbito bélico, se afirma que “los aficionados hablan de estrategia; los profesionales, de logística”. Tanto la Fuerza Aérea de los Estados Unidos como el ejército en general son considerados poderosos y temidos a nivel global, gracias en gran medida a su destacada flota de aviones cisterna y sus avanzados aviones de combate.
Modelos como el F-35A y el F-22 Raptor son considerados entre los mejores cazas en la actualidad, pero carecen de utilidad si no cuentan con suficiente combustible. La capacidad de Estados Unidos para reabastecer sus aviones hambrientos de combustible y mantenerlos en vuelo es algo que ninguna otra nación puede igualar.
Mientras que la mayoría de los ejércitos están organizados para operar principalmente dentro de sus fronteras o en países vecinos, el ejército estadounidense está diseñado para proyectar poder a nivel mundial, sin una especial atención a la defensa contra posibles invasiones canadienses. Se ha afirmado que el ejército de Estados Unidos es, en esencia, una organización logística que también se dedica a la guerra.
Aviones militares de EE. UU. con capacidad de reabastecimiento de combustible

Varios aviones militares estadounidenses están equipados para realizar reabastecimiento de combustible, incluyendo:
- KC-46A Pegasus (Fuerza Aérea)
- Extensores KC-10 (los últimos fueron retirados en 2024)
- KC-135 Stratotanker (Fuerza Aérea)
- MC-130J/KC-130 Super Hercules/Hercules (Fuerza Aérea, Marina, Marines)
- Super Hornets (Marina)
- Dron MQ-25 Stingray (Marina)
- MV-22 Osprey (Marines)
Según datos de FlightGlobal, la Fuerza Aérea de Estados Unidos opera aproximadamente 600 aviones cisterna, lo que representa cerca del 75% del total mundial. Esto indica que en términos de reabastecimiento aéreo, la mayoría proviene de EE. UU., dejando un porcentaje menor para el resto del mundo.
Sin embargo, la capacidad de reabastecimiento de Estados Unidos no se limita a los Stratotankers y Pegasus. La Armada tiene la capacidad de usar Super Hornets para reabastecer a otros Super Hornets. Además, Boeing está desarrollando el dron MQ-25 Stingray, que se destinará a operaciones de reabastecimiento de combustible para la Armada estadounidense.