El posible impacto de un misil en un portaaviones de EE. UU. podría materializarse en un futuro próximo, en medio de afirmaciones hutíes de haberlo conseguido.
Ataques de los Hutíes en el mar Rojo: Realidad y Desafíos
El capitán Christopher Hill del USS Dwight D. Eisenhower recientemente ridiculizó las falsas afirmaciones de los islamistas hutíes sobre el hundimiento del portaaviones, un rumor propagado por redes sociales iraníes y chinas. A pesar de la superioridad abrumadora de la Marina de los EE. UU., los ataques hutíes a embarcaciones en el mar Rojo siguen siendo motivo de preocupación. Los hutíes, respaldados por Irán, han acumulado un arsenal significativo, incluidos vehículos aéreos no tripulados (UAV) y misiles antibuque, con el apoyo iraní reforzando sus capacidades desde 2015. Aunque su actual falta de inteligencia avanzada y vigilancia reduce el nivel de amenaza, la posibilidad de un ataque exitoso no puede ser totalmente descartada, ya que Irán continúa mejorando su armamento.
El líder del USS Dwight D. Eisenhower recurrió recientemente a las redes sociales para burlarse de los islamistas hutíes, quienes afirmaron haber hundido el portaaviones a principios de este mes. El grupo militante respaldado por Irán ha proclamado haber golpeado o hundido la nave en numerosas ocasiones. Cuentas en redes sociales vinculadas a los gobiernos de Irán y China han circulado estos rumores, que fueron en gran medida desestimados. Sin embargo, el capitán Christopher Hill respondió a la absurda afirmación en una entrevista con la Associated Press, señalando que el grupo con base en Yemen está “intentando tal vez inspirarse a través de la desinformación”.
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Obviamente, la Marina de los EE. UU. supera con creces a los islamistas hutíes en términos de personal, armamento y capacidad. Independientemente de este hecho, los ataques frecuentes del grupo militante a embarcaciones comerciales y buques de guerra en el mar Rojo no deben ser desestimados como insignificantes. En la misma entrevista con la Associated Press mencionada anteriormente, un marinero a bordo del Eisenhower expresó que “Es básicamente el estrés diario de saber que nos están disparando, lo que definitivamente da una realidad a toda la experiencia de que esto no es un despliegue normal”.
Mejoras en el Arsenal Hutí y su Amenaza Potencial
Estados Unidos y el Reino Unido han estado llevando a cabo ataques de represalia dirigidos a los hutíes y sus activos en la región en un esfuerzo por degradar aún más las capacidades del grupo. Desde la masacre del 7 de octubre en Israel por parte de Hamás, el grupo vinculado a Irán se ha asociado con otros afiliados regionales del régimen para bombardear el Golfo de Omán y el mar Rojo con ráfagas. Los hutíes han acumulado en gran medida un arsenal de vehículos aéreos no tripulados (UAV) y armamento antibuque, incluidos misiles de crucero y misiles balísticos.
Al igual que sus afiliados terroristas regionales patrocinados por Irán, los hutíes han adquirido entrenamiento, financiamiento y gran cantidad de suministros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI). Según lo detallado por el International Institute for Strategic Studies a principios de este año, “La asistencia iraní ha sido clave para estas mejoras en la capacidad de misiles antibuque de los hutíes desde 2015. En 2016, los hutíes golpearon el catamarán de transporte de tropas emiratí HSV-2 Swift e intentaron atacar al USS Mason (DDG-87), un destructor de misiles guiados de la clase Arleigh Burke, lo que llevó a Estados Unidos a disparar misiles de crucero de ataque terrestre Tomahawk (LACM) contra objetivos hutíes”.
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Aunque los hutíes emplearon misiles antibuque de fabricación iraní en estos ataques, faltaba evidencia contundente de este vínculo en ese momento. A pesar de tener este vasto arsenal disponible, los hutíes carecen de herramientas de inteligencia, reconocimiento y vigilancia que a menudo son necesarias al usar sistemas antibuque de largo alcance. Esta discrepancia, junto con la superioridad de los sistemas militares de Estados Unidos y las capacidades de los portaaviones, hace que sea extremadamente improbable que el grupo pueda causar daños serios a cualquiera de sus buques de guerra.
Vigilancia Continua y la Posibilidad de Ataques Futuras
El Eisenhower, sin embargo, al igual que sus portaaviones hermanos, no es invencible. A medida que Irán continúa alimentando el arsenal de armas de los hutíes, el potencial de un futuro ataque a un portaaviones estadounidense no está completamente fuera de cuestión. La colaboración continua entre los hutíes y el CGRI sugiere que los hutíes pueden eventualmente adquirir la capacidad de realizar ataques más precisos y letales. Esto subraya la necesidad de vigilancia constante y actualización de las contramedidas defensivas por parte de la Marina de los EE. UU.
La evolución de las capacidades hutíes debe ser monitoreada de cerca. Las lecciones aprendidas de enfrentamientos anteriores, como los ataques al HSV-2 Swift y al USS Mason, deben ser utilizadas para fortalecer las defensas y tácticas de la Marina de los EE. UU. Mantener una superioridad tecnológica y táctica seguirá siendo crucial para mitigar cualquier amenaza potencial de misiles antibuque hutíes.
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En conclusión, aunque los hutíes actualmente carecen de las capacidades necesarias para infligir daños graves a un portaaviones de Estados Unidos, la continua mejora de su arsenal respaldado por Irán representa una amenaza que no puede ser ignorada. La Marina de los EE. UU. debe seguir adaptándose y evolucionando para contrarrestar estos desarrollos y asegurar la seguridad de sus activos en el mar Rojo y más allá.