Las autoridades turcas han abierto un concurso para desarrollar un motor que impulse el futuro avión de combate furtivo de quinta generación TF-X. El proceso está limitado a los fabricantes turcos, dos de los cuales, Tusas Engine Industries y TR Motor, han respondido a la solicitud de propuestas, según el organismo de adquisiciones militares del país, conocido por sus siglas SSB.
Además, se espera que la alianza que el fabricante británico Rolls Royce y el conglomerado industrial local Kale Group han creado bajo el nombre de TAEC, de la que la parte turca controla la mayoría, el 51 %, participe en la licitación, según Defense News.
La elegida deberá garantizar que la producción del motor tendrá lugar en Turquía, donde también se mantendrán los derechos de propiedad intelectual, y que no podrá restringir las licencias de exportación, además de lograr un buen grado de rentabilidad, según el jefe de la SSB, Ismail Demir.
El motor americano F110
A principios de junio se entregó a Turquía un motor turbofan General Electric F110 producido por GE Aviation. En junio, se informó de que el motor estadounidense llegaría a Turquía para propulsar el caza TF-X, pero como escribimos entonces, este motor solo se utilizará para propulsar el prototipo. Turquía no tiene intención de usar un motor de fabricación estadounidense en la producción en serie del caza de nueva generación TF-X.
Turquía fue expulsada del programa F-35 después de que no quisiera comprar el sistema de misiles antiaéreos estadounidense Patriot y decidiera comprar el sistema de defensa aérea ruso S-400. Después de hacer la compra y de que Ankara realizara las primeras pruebas del sistema, así como de activarlo en disposición de combate, Washington impuso sanciones económicas al Estado turco.
Sin embargo, Turquía tiene la intención de comprar un segundo lote de sistemas de defensa aérea S-400 a Rusia, con “rumores” de que Ankara está dispuesta a producir conjuntamente con Moscú el sistema S-500, la última variante, mucho más peligrosa y eficaz, de un sistema de misiles antiaéreos capaz de alcanzar satélites de órbita baja.