El viernes, seis integrantes de Hezbolá murieron en ataques aéreos israelíes separados en el sur del Líbano. Estos incidentes ocurrieron mientras la organización terrorista, con respaldo iraní, lanzaba misiles antitanque y cohetes hacia el norte de Israel.
Israel intensifica ataques aéreos tras agresiones de Hezbolá desde el sur del Líbano
Entre las ofensivas israelíes se incluyó el ataque a una célula de Hezbolá en la aldea de Tayr Harfa, que se preparaba para lanzar cohetes. En este ataque, tres miembros de la organización murieron. Otros tres operativos de Hezbolá fueron abatidos en bombardeos en las localidades de Ayta al-Jabal, Mays al-Jabal y Aitaroun.
Informes de medios libaneses indicaron que drones israelíes atacaron un vehículo en la ciudad de Maarakeh, situada en el sur del Líbano, en el distrito de Tiro. A pesar de estos reportes, no se proporcionaron más detalles sobre el ataque. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que uno de los ataques en Ayta al-Jabal tenía como blanco a Muhammad Najam, un miembro destacado de la unidad de cohetes y misiles de Hezbolá. Además, se reportó la muerte de su sobrino, Zulfiqar Radwan, en el mismo ataque.
Según las FDI, el operativo de Mays al-Jabal, quien había disparado cohetes hacia la zona de Yiftah más temprano, fue identificado en un edificio utilizado por Hezbolá y murió en el ataque. Por otro lado, el operativo en Aitaroun fue abatido mientras lanzaba proyectiles hacia Malkia. En un comunicado emitido por Hezbolá el viernes por la tarde, la organización anunció la muerte de cinco de sus miembros, entre ellos Najam, refiriéndose a ellos como mártires caídos “en el camino a Jerusalén”, un término usado para describir a aquellos que mueren en enfrentamientos con Israel.
Hezbolá intensifica ataques contra el norte de Israel desde el 8 de octubre
Con las bajas reportadas, Hezbolá ha confirmado la muerte de al menos 424 de sus miembros desde que comenzaron los ataques hacia el norte de Israel el 8 de octubre, un día después de que su aliado Hamás lanzara un ataque terrorista desde Gaza. Los recientes bombardeos israelíes se produjeron en respuesta a múltiples ataques de Hezbolá ese mismo día, incluyendo misiles dirigidos a la base del Monte Meron.
El Monte Meron, situado aproximadamente a ocho kilómetros de la frontera libanesa, ha sido objeto de numerosos ataques por parte de Hezbolá durante la guerra. Estos ataques han incluido tanto ráfagas de cohetes como misiles guiados hacia la estratégica base de control de tráfico aéreo ubicada en la cima del monte. Durante el último ataque registrado, Hezbolá disparó tres proyectiles hacia la base, de los cuales uno fue interceptado, según informaron las FDI. A pesar de estos ataques, no se han reportado heridos.
Además de los ataques dirigidos a la base del Monte Meron, Hezbolá lanzó aproximadamente 20 cohetes hacia el norte de Israel el viernes. Aunque ninguno de estos cohetes causó heridos, el constante lanzamiento de misiles y cohetes mantiene en alerta a las fuerzas israelíes. Desde el inicio de las hostilidades, las fuerzas alineadas con Hezbolá han atacado casi a diario comunidades israelíes y posiciones militares a lo largo de la frontera.
Confrontaciones dejan víctimas civiles y militares en ambos lados de la frontera
Los enfrentamientos entre Hezbolá e Israel han causado la muerte de 26 civiles israelíes, así como de 19 soldados y reservistas de las FDI desde el comienzo de las hostilidades. Además, se han reportado varios ataques desde Siria, aunque estos no han dejado heridos. La escalada de violencia ha llevado a una situación de creciente tensión en la región, con ataques casi diarios.
En medio de estos combates, Hezbolá ha anunciado la muerte de 424 de sus miembros, la mayoría de los cuales han caído en enfrentamientos en el sur del Líbano, aunque algunos también han muerto en Siria. Además de estas bajas, otros 73 combatientes de distintos grupos terroristas han sido abatidos en el Líbano por ataques israelíes. Los enfrentamientos también han causado la muerte de un soldado libanés y de varios civiles.