En un movimiento que subraya su compromiso con la defensa aérea dentro de la OTAN, Noruega ha asegurado una importante adquisición militar valorada en 405 millones de dólares (equivalente a 4.300 millones de coronas noruegas) tras recibir la aprobación de Estados Unidos.
Este acuerdo, anunciado el 22 de agosto de 2024, contempla la transferencia de avanzados misiles aire-aire de alcance medio y extendido, conocidos como AMRAAM-ER, junto con equipos relacionados, al país escandinavo, un aliado clave de la OTAN.
La transacción incluye la entrega de cien misiles AMRAAM-ER, además de cuatro secciones de guiado y diversos elementos de apoyo, como contenedores, piezas de repuesto y equipos de entrenamiento. También se ha previsto proporcionar apoyo técnico y logístico para facilitar la integración de estos sistemas en la infraestructura de defensa ya existente en Noruega.
Según datos de GlobalData referentes al mercado de defensa de Noruega, los misiles y sistemas de defensa antimisiles representan el tercer segmento más relevante del sector. Este segmento no solo es uno de los más grandes del país, sino que también se anticipa un significativo crecimiento en los próximos años, con una tasa compuesta anual proyectada del 28,6% para el periodo 2023-2028.
El propósito de esta adquisición es reforzar la capacidad de Noruega para enfrentar amenazas aéreas emergentes, en línea con sus esfuerzos por modernizar su defensa aérea mediante la sustitución de los obsoletos misiles AMRAAM-120 B por los más recientes AMRAAM-ER.
RTX Corporation, una empresa con sede en Tucson, Arizona, será el principal contratista encargado de suministrar los nuevos sistemas de misiles.
El mismo día del anuncio de este acuerdo, Rumania también optó por fortalecer sus capacidades de defensa aérea, adquiriendo misiles AIM-120C-8 AMRAAM a Estados Unidos por un monto de 592 millones de dólares, tras la aprobación del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Estas adquisiciones no solo potencian las capacidades defensivas de Noruega, sino que también reafirman su compromiso constante con la OTAN y con la estabilidad en la región, en un contexto de seguridad global que continúa cambiando rápidamente.