Pakistán ha anunciado con el exitoso vuelo de prueba del sistema guiado de lanzamiento múltiple de cohetes Fatah-II, un logro que representa un avance significativo en su capacidad militar.
Este armamento de vanguardia, desarrollado internamente, ha sido elogiado por su avanzada aviónica, sistema de navegación de última generación y una trayectoria de vuelo distintiva que lo distingue como un testimonio de la innovación tecnológica del país.
El Fatah-II, según informes militares, cuenta con una precisión excepcional y un alcance de hasta 400 kilómetros. Este éxito en la prueba de vuelo fue presenciado por destacados oficiales de las fuerzas armadas, así como por científicos e ingenieros, resaltando el esfuerzo colaborativo y la experiencia dedicados a este proyecto.
Equipado con un avanzado Sistema Integrado de Control de Disparo (CTI), el Fatah-II optimiza el mecanismo de puntería y guiado del misil, asegurando una coordinación eficiente entre el misil y la plataforma de lanzamiento.
El presidente Arif Alvi y los altos mandos militares han expresado sus sinceras felicitaciones a los soldados y científicos que han contribuido a este logro trascendental para la seguridad nacional.
Este hito no es el primero para Pakistán en el desarrollo de armas de alta tecnología. En 2021, el país realizó exitosas pruebas de misiles de crucero Fatah-I y Ra’ad-II. Estos constantes esfuerzos por fortalecer sus capacidades de defensa han sido reconocidos internacionalmente.
La serie Fatah, montada en camiones militares, ofrece una versatilidad excepcional al permitir ataques dirigidos a una amplia gama de objetivos con diversas municiones. El Fatah-I, por ejemplo, tiene la capacidad de atacar hasta ocho objetivos en un radio de acción de 8 km x 8 km², con un alcance que va desde 70 km hasta 140 km. Esta capacidad lo posiciona como un activo crucial para operaciones de ataque de precisión.
La primera prueba de vuelo exitosa del Fatah-I en enero de 2021 demostró su capacidad para lanzar una ojiva convencional a su alcance máximo con un impresionante error circular probable (CEP) de menos de 50 metros. El sistema de Control de Disparo Integrado (CTI) juega un papel fundamental en esta precisión, garantizando una coordinación perfecta entre el misil y la plataforma de lanzamiento.