El Proyecto 22350M de la Armada rusa estará equipado con misiles tierra-aire (SAM) con un alcance máximo de 400 kilómetros, según un reciente informe de los medios estatales rusos.
Según los informes, estos SAM se derivan de los misiles interceptores 40N6 del sistema de defensa antiaérea más avanzado de Rusia, el S-400.
“El sistema Poliment-Redut que se instalará en las fragatas mejoradas del proyecto 22350M contará con misiles pesados de alcance superlargo con capacidad para alcanzar objetivos aéreos a una distancia máxima de 400 km, además de misiles de defensa antiaérea de alcance medio y largo”, dijo un miembro anónimo de la industria de defensa rusa a TASS el 3 de febrero.
El proyecto 22350M es una versión de gran tamaño de las fragatas de la clase Almirante Gorshkov del proyecto 22350. El buque de guerra Almirante Gorshkov ha sido noticia recientemente por su expedición en curso en el océano Atlántico.
Es la primera vez que un buque de guerra armado con misiles hipersónicos entra en combate.
A continuación, el Almirante Gorshkov se unirá a los ejercicios navales con las armadas china y sudafricana previstos del 17 al 27 de febrero en el océano Índico, frente a la costa este de Sudáfrica, cerca de las ciudades de Durban y Richards Bay.
El Almirante Gorshkov lleva dos lanzaderas de misiles tierra-aire Poliment-Redut para 16 misiles, sin embargo, la quinta fragata de su clase, el Almirante Amelko, llevará cuatro lanzaderas de ocho misiles cada una. Las variantes más grandes del Proyecto 22350M irán equipadas con seis lanzadores para 48 misiles.
En la actualidad, estas lanzaderas de misiles Poliment-Redut pueden disparar misiles con un alcance de ataque de 150 kilómetros, sin embargo, la adición de los nuevos misiles de 400 kilómetros supondrá triplicar su alcance de interceptación, lo que, según se informa, permitirá a los buques controlar zonas siete veces más grandes.
La fuente de la industria de defensa rusa explicó que tal triplicación del alcance de interceptación permitiría a las fragatas rusas enfrentarse a los aviones de alerta temprana y control aerotransportados (AEW&C) de largo alcance de la OTAN.
¿Versión naval de los misiles S-400?
Se especula con que los nuevos SAM de 400 kilómetros sean un análogo naval del misil 40N6, el interceptor de mayor alcance del sistema de defensa antiaérea S-400.
Al parecer, esta versión naval del misil 40N6 lleva más de una década en desarrollo. Aunque no se han especificado sus características de rendimiento, los informes rusos sugieren que el misil tendrá un rendimiento similar al 40N6.
El 40N6 fue diseñado y desarrollado por el fabricante de misiles ruso MKB Fakel y, según los informes, fabricado por la empresa MMZ Avangard, con sede en Moscú.
Aunque Rusia dio a conocer el misil en 2018, al parecer sufrió repetidos fallos en las pruebas, por lo que no se puso en producción en serie hasta 2019.
El misil se despliega principalmente contra objetivos aéreos de alto valor, como aviones de reconocimiento y EW, puestos de mando aéreo, bombarderos estratégicos, cruceros hipersónicos y misiles balísticos.
Según fuentes oficiales, el alcance máximo del misil contra objetivos aerodinámicos es de hasta 380 kilómetros, y el alcance mínimo es de hasta 5 kilómetros, mientras que la altura máxima hasta la que puede atacar objetivos es de 30 kilómetros.
La velocidad media del misil se sitúa en torno a Mach 3,4, y la velocidad máxima en torno a Mach 9. Se ha informado de que puede alcanzar objetivos a una velocidad de Mach 3,4. Puede alcanzar objetivos a una velocidad de hasta Mach 15,6.
El misil lleva una ojiva de fragmentación explosiva y también está equipado con un radar de guía activa, que le permite destruir objetivos fuera de la visibilidad por radio de los localizadores terrestres. Se dice que el misil tiene una precisión del 95 por ciento.
La incorporación de una variante naval del misil 40N6 podría permitir a las fragatas rusas contribuir potencialmente a la defensa aérea estratégica, de forma similar a los destructores AEGIS estadounidenses, japoneses y surcoreanos, que lo hacen utilizando los misiles SM-3 y SM-6.
A diferencia de estos tres países que operan con AEGIS, Rusia ha optado hasta ahora por desplegar sus defensas contra misiles balísticos mediante lanzadores móviles terrestres en lugar de buques.
Por tanto, es posible que la integración de sistemas de defensa contra misiles balísticos de largo alcance a bordo de las fragatas del Proyecto 22350M les permita también complementar los sistemas de defensa antiaérea S-400 y S-500 basados en tierra.
En conjunto, puede decirse que las fragatas del Proyecto 22350M, armadas con misiles hipersónicos Tsirkon y los SAM de 400 kilómetros de alcance, poseen unas capacidades ofensivas y defensivas sin parangón que muy pocos tipos de buques en el mundo serían capaces de desafiar.