Dos buques de guerra rusos que transportaban misiles de crucero Kalibr han entrado en el Mar Negro, pero las reservas de estos misiles se han agotado, ha declarado en la televisión ucraniana la portavoz del Centro Conjunto de Prensa de las Fuerzas de Defensa del Sur, Nataliya Gumenyuk.
Según ella, desde el domingo por la mañana, los buques de guerra y submarinos rusos que transportan los misiles están en servicio de combate. Este grupo naval puede lanzar potencialmente hasta ocho misiles.
Señaló que las Fuerzas Armadas ucranianas observan “cierta incertidumbre del enemigo en el número de misiles”.
“Están tratando de llevar más Kalibrs a Sebastopol, porque lo más probable es que no tengan suficientes”, dijo la portavoz.
Según ella, Rusia no ha detenido por completo la producción de estos misiles, pero esta industria sufre considerablemente debido a las sanciones.
“Esto sugiere que las existencias no se reponen al ritmo que les gustaría. Sin embargo, según la valoración general de los expertos, el número de Kalibrs disponibles se mantiene en torno al 20%. Se trata de un nivel de existencias críticamente bajo. Pero entendemos que pueden encontrar algunos misiles adicionales”, advirtió Gumenyuk.
Según la Armada ucraniana, Rusia mantiene un grupo de diez buques en el Mar Negro.
En el último ataque con misiles contra Ucrania, Rusia disparó cuatro misiles Kalibr. Dos de ellos fueron derribados por las fuerzas de defensa antiaérea ucranianas.