Saab Inc. suministrará la munición de asalto individual XM919 al Ejército estadounidense por 494,35 millones de dólares.
Saab gana contrato multimillonario para munición de asalto individual XM919
Saab Inc., ubicada en East Syracuse, Nueva York, ha sido galardonada con un significativo contrato a precio fijo de 494,35 millones de dólares para proporcionar la munición de asalto individual (IAM) XM919 al Ejército de los Estados Unidos. La adjudicación de este contrato fue el resultado de un competitivo proceso de licitación en línea en el que participaron tres empresas. Las ubicaciones para la fabricación y los fondos asignados se determinarán con cada pedido específico, y se proyecta que el contrato se complete para el 26 de agosto de 2029. El Comando de Contrataciones del Ejército en Newark, Nueva Jersey, está a cargo de supervisar la actividad contractual.
El logro de Saab en asegurar este contrato se da en un entorno de intensa competencia, enfrentándose a otros actores importantes en el ámbito de la defensa. Entre los competidores se encontraban General Dynamics Ordnance and Tactical Systems (GD-OTS), en colaboración con la empresa alemana Dynamit Nobel, y Nammo, una compañía noruega de defensa. Estos también participaron en la contienda por obtener este lucrativo acuerdo.
El programa de munición de asalto individual (IAM), bajo la dirección del proyecto de sistemas de combate cercano (PM CCS), incluye el uso del arma XM919 y de herramientas de entrenamiento como el entrenador de subcalibre XM922. La necesidad de desarrollar el IAM se ha evaluado desde al menos el año 2016. De acuerdo con la solicitud presupuestaria para el año fiscal 2024 del Ejército, el XM919 IAM está destinado a ser un arma antiblindaje ligera que equipará a soldados individuales en unidades de combate, especialmente aquellas involucradas en operaciones urbanas. Está diseñada para neutralizar a enemigos en vehículos blindados ligeros o escondidos detrás de fortificaciones improvisadas, ofreciendo “efectos letales detrás de la pared”. Además, se prevé que el sistema sea eficaz en condiciones de luz diurna y nocturna, así como en espacios reducidos, sustituyendo así a las armas ligeras antiblindaje M72, las variantes M136 AT4 y la munición de anulación de búnkeres M141, para simplificar los procedimientos de mantenimiento y entrenamiento.
El XM919 IAM: una evolución tecnológica del arma AT4 de Saab
El XM919 IAM es una versión avanzada de la consolidada serie M136 de Saab, conocida también como la familia AT4, que el nuevo sistema reemplazará. El AT4 es un arma sin retroceso de 84 mm, precargada y de un solo uso, derivada del rifle sin retroceso Carl Gustaf, el cual ha sido un pilar en varios ejércitos. Mientras que el Carl Gustaf es recargable, el AT4 está diseñado para ser utilizado una única vez, descartando el tubo de lanzamiento tras el disparo. Desde los años 80, el Ejército de los EE. UU. ha incorporado múltiples variantes del AT4, incluyendo las versiones AT4CS (Espacio Confinado), diseñadas para disparar con seguridad desde espacios cerrados, como dentro de edificios. Esta característica es especialmente crucial para reducir el riesgo al personal durante combates en entornos urbanos, donde el retroceso de otras armas antiblindaje podría aumentar el peligro para los operadores.
Para la competencia IAM, Saab presentó la variante AT4CS TW, que está equipada con una ojiva en tándem. Este tipo de proyectil está ideado para destruir vehículos blindados, especialmente aquellos con protección adicional, como el blindaje reactivo explosivo (ERA). El diseño de la ojiva en tándem, que actúa en dos etapas, permite penetrar defensas con múltiples capas y objetivos reforzados, tales como paredes de concreto, al tiempo que mantiene su capacidad de causar daños letales en el interior. Los requisitos del Ejército de los EE. UU. para el IAM estipulaban que debía ser un arma de un solo uso para un solo soldado, con un peso inferior a 20 libras y una longitud no mayor a 40 pulgadas, además de poder dispararse desde espacios cerrados y tener un alcance efectivo de hasta 1.640 pies (500 metros).
Se espera que el XM919 sea efectivo contra una variedad de objetivos, incluyendo blindajes ligeros, búnkeres, concreto armado y paredes de ladrillo. Estos son los tipos de objetivos que actualmente las unidades del Ejército practican para atacar utilizando armas como el M136, el M72 y el M141.
El XM919 podría sustituir las armas antiblindaje actuales en el Ejército de EE. UU.
El M72, un cohete más pequeño de 66 mm, ha estado en servicio desde los años 60, mientras que la munición M141 Bunker Defeat Munition (BDM) de 83 mm, introducida a finales de los 90, está diseñada para usarse contra fortificaciones, estructuras y vehículos blindados ligeros. La elección de la variante AT4 de Saab como el nuevo XM919 podría simplificar los entrenamientos y la logística, dado que esta arma ya es conocida dentro del inventario actual del Ejército. Además, se ha propuesto un modelo de entrenamiento de subcalibre, denominado XM922, para permitir prácticas seguras en campos de tiro no aptos para utilizar la munición IAM real.
La entrada en servicio del XM919 en el Ejército de los EE. UU. podría abrir la posibilidad de que otras ramas de las fuerzas armadas también adopten este sistema, tal como ocurrió con su predecesor, el M136. Adicionalmente, este desarrollo podría aumentar las ventas internacionales, especialmente a través del programa de Ventas Militares al Extranjero (FMS) de los EE. UU., ya que la familia AT4 tiene una fuerte presencia en mercados de defensa globales.
La decisión del Ejército de los Estados Unidos de reemplazar los sistemas M72, M136 y M141 con el XM919 podría conducir a que las armas más antiguas sean suministradas a naciones aliadas. Por ejemplo, Ucrania ya ha recibido envíos de estas armas como parte del apoyo internacional desde que comenzó la guerra en 2022. La actual guerra en Ucrania ha subrayado la importancia de las armas portátiles en la guerra moderna, en especial en escenarios urbanos donde los vehículos blindados y las posiciones fortificadas son comunes. El XM919, con sus capacidades avanzadas, está diseñado para ser un recurso crucial para las fuerzas estadounidenses en futuros conflictos, incluyendo potenciales enfrentamientos de alta intensidad en áreas densamente pobladas, como las previstas en la región del Indopacífico.
El futuro del XM919: potencial adopción internacional y escenarios de combate
Si Saab efectivamente logra cumplir con este contrato, las unidades del Ejército de los Estados Unidos podrían comenzar a recibir el nuevo IAM XM919 a partir del próximo año. Esto representaría una mejora notable en las capacidades antiblindaje disponibles para los soldados estadounidenses. La efectividad del XM919 en combate podría no solo garantizar su adopción generalizada dentro de las fuerzas armadas estadounidenses, sino también aumentar su atractivo para los mercados de exportación a nivel global, donde las fuerzas armadas buscan constantemente actualizar sus arsenales con tecnología de punta.
El impacto del XM919 también podría verse en su capacidad para integrarse en el programa de Ventas Militares al Extranjero (FMS) de los Estados Unidos, lo que permitiría su exportación a otros países aliados que enfrentan amenazas similares en el ámbito de la defensa. La familia de armas AT4, de la cual deriva el XM919, ya ha demostrado su eficacia en varios conflictos alrededor del mundo, consolidando su reputación como una herramienta esencial en la guerra moderna. La incorporación de este sistema en los arsenales internacionales podría mejorar las capacidades defensivas de los aliados de Estados Unidos, alineando así las estrategias de defensa a nivel global.
En última instancia, el éxito de Saab en asegurar este contrato con el Ejército de los Estados Unidos no solo fortalece su posición en el mercado de defensa estadounidense, sino que también subraya la continua demanda de soluciones innovadoras y eficaces en el ámbito militar. Con el XM919, Saab no solo refuerza su legado con la familia AT4, sino que también avanza hacia el futuro con una herramienta que promete redefinir las capacidades antiblindaje para los soldados en el campo de batalla.