Dmitri Medvédev, destacado miembro del Consejo de Seguridad de Rusia, compartió insights el 22 de febrero sobre las causas detrás de la decisión de no desplegar el avanzado tanque T-14 Armata en la guerra en UCrania.
“El Armata representa una adición reciente a nuestro arsenal de blindados y todavía está en proceso de superar todas las etapas de prueba requeridas”, explicó. Adicionalmente, enfatizó que no constituye “la alternativa más coste-efectiva entre los vehículos blindados”. Existe una percepción generalizada de que el T-14 Armata es más un instrumento para maniobras de imagen que un activo militar operativo.
En línea con esta visión, Medvédev reconoció durante el debate sobre la no utilización del T-14: “Hay una gran diferencia entre los desfiles y el combate. Son dos escenarios completamente distintos”. Esta declaración subraya la premisa de que la apariencia de un tanque en ceremonias no garantiza su eficacia en condiciones de combate.
El T-14 Armata: entre la innovación y la polémica
Con la aproximación del noveno aniversario de su presentación en mayo de 2015, la imagen del T-14 Armata se ha visto empañada por su problemática implementación, afectada por la incapacidad de consolidar un blindado de combate definitivamente listo para el enfrentamiento.
Además, los aspectos más innovadores del T-14 fueron desarrollados casi en su totalidad durante la época soviética, bajo el proyecto T-95. Visto por muchos como una versión más accesible y “ligera” del T-95 descontinuado, el T-14 encarnaba un desafío para la industria de defensa possoviética, menos dotada de recursos en comparación con la extinta URSS.
Medvédev defendió la elección de prescindir del T-14 en el campo de batalla, resaltando las ventajas del T-90M, la opción predilecta de las fuerzas armadas rusas.
“Contamos con un activo formidable en nuestro T-90M Proryv. Este tanque, alabado por el presidente [Putin] como el mejor del globo, cuenta con mi pleno respaldo”, afirmó. La eficacia del T-90M ha sido corroborada por aquellos inmersos en las operaciones ucranianas.
Los militares retornados y los responsables de adquisiciones militares no cesan en sus alabanzas hacia el T-90M. “Es un sistema de armas sobresaliente”. Ya en marzo de 2023, Medvédev declaraba: “A mi juicio, el T-90M no tiene rival… Superando a los [tanques] Leopard, Challenger y Abrams en todas las especificaciones técnicas, incluyendo el peso”.
En julio, solo cuatro meses después, el presidente Vladimir Putin también destacó la resistencia del T-90M frente a un ataque con una bomba al margen de una carretera.
El T-90 y el T-14 Armata: evolución y desafíos en la vanguardia blindada
El T-90, una evolución directa del T-72 introducido en 1973, se estableció como una solución eficaz y económica frente al T-64, un destacado, pero costoso tanque principal de combate que había fortalecido el arsenal soviético desde la década de 1960.
Originalmente designado como T-72BU, el tanque fue renombrado a T-90 en 1990, buscando destacar su superioridad y potenciar su atractivo en el mercado internacional. El T-90M, la variante más avanzada hasta la fecha, se distingue dentro del catálogo de vehículos blindados rusos por su excepcional potencia de fuego, avanzados sistemas de detección y robustez de su blindaje. Aunque sus capacidades son notables, no logran igualar la innovación radical del T-14, que se concibió como un diseño revolucionario.
Para el año 2023, se prevé la integración de un tercer contendiente en la línea de tanques principales de combate. Este nuevo modelo se desarrollará a partir del T-80, una versión superior del T-72 que llegó a ser el predilecto en las fuerzas soviéticas hasta que su producción cesó en los noventa, dando paso a la fabricación de los más coste-efectivos T-72/90. Aunque es probable que este renovado T-80 coexista con las versiones mejoradas del T-90, el futuro del proyecto T-14, significativamente más avanzado, permanece en una nebulosa de incertidumbre.
T-14 Armata: innovación en tecnología de supervivencia y blindaje
El T-14 Armata se distingue en el panorama de vehículos blindados por sus características sobresalientes, con un énfasis particular en la supervivencia de la tripulación. Este logro se atribuye a su diseño revolucionario, que incluye una torreta no tripulada y un compartimento de tripulación fortificado y separado.
Se estima que el blindaje frontal del Armata, superior a los 900 mm, junto al blindaje reactivo explosivo Malachit y el sistema de protección activa AFGHANIT, le otorga una ventaja sin precedentes en supervivencia sobre otros tanques a nivel mundial desde una perspectiva teórica.
Además de su robustez, el Armata sobresale por su tecnología de sensores y capacidades ofensivas. Ofrece avances notables frente a modelos anteriores como el T-90M y otros tanques rusos. Su proyectil Vacuum-1, con estabilización por aletas y sin sabot, proporciona una capacidad de penetración superior, capaz de atravesar frontalmente los blindajes más avanzados, especialmente en escenarios de conflicto como el ucraniano.
El T-14 Armata en pruebas: Un gigante en el campo de batalla
El T-14 no solo impresiona por sus especificaciones técnicas, sino también por su rango de ataque, que supera por tres veces al de cualquier tanque occidental en servicio. Las pruebas en terreno y los informes de su despliegue en Ucrania han captado la atención mundial. Según fuentes de la industria de defensa rusa citadas por TASS en agosto de 2023, el Armata ha sido desplegado en varias ocasiones en la zona de conflicto ucraniano, proporcionando una oportunidad única para evaluar y refinar sus capacidades en condiciones reales.
“El tanque Armata ha participado en la zona de conflicto militar ucraniano en varias ocasiones. Los datos recolectados de estas operaciones están siendo analizados para optimizar aún más el diseño del vehículo”, reportó una fuente confidencial. Estos comentarios subrayan el compromiso continuo con la mejora del T-14, asegurando que su rendimiento en el campo de batalla alimente el proceso de evolución tecnológica del blindado.