Israel presenta su innovador tanque Barak, resultado de la alianza entre tecnología militar avanzada, MANTAK y empresas de defensa locales. Un proyecto que demuestra la evolución tecnológica de Israel en el escenario de combate mundial.
Barak: El linaje evolutivo de la familia Merkava
El tanque Barak emerge como una versión sofisticada de la aclamada serie de tanques Merkava. Esta joya de la ingeniería ha estado en desarrollo por casi una década, supervisada meticulosamente por la Administración de Tanques del Ministerio de Defensa israelí (MANTAK) y colaboradores defensivos locales.
El éxito de Barak no es fortuito; es un testimonio del impulso tecnológico de Israel en campos de batalla y esfuerzos comerciales. El Merkava MK4 Barack, ya en 2017, fue proyectado como un “tanque inteligente”, equipado con avanzados sensores diseñados para identificar y neutralizar amenazas con precisión y celeridad.
A lo largo de los años, Israel ha integrado tecnologías revolucionarias en este proyecto, como el sistema de protección activa Trophy y otros sensores de vanguardia. Las autoridades defensivas israelíes lo consideran el tanque más avanzado de la contemporaneidad.
El cambiante panorama del combate global
El teatro de guerra está en constante evolución. Las guerras convencionales resurgen, contrastando con la era de contrainsurgencia que dominó cuando Barak estaba en sus etapas iniciales. Aquella era se caracterizó por unidades tácticas, fuerzas de operaciones especiales y tecnología punta, pero con menor énfasis en maquinaria pesada.
Preparándose para las futuras contiendas, Israel recuerda la Guerra del Yom Kippur hace medio siglo, un conflicto que presentó desafíos tecnológicos significativos. Enfrentados a misiles SAM suministrados por Rusia y tropas armadas con misiles Sagger y RPG-7, Israel tuvo que adaptarse y superar.
Lecciones del pasado: adaptación y superación
La historia bélica de Israel destaca su capacidad para adaptarse a amenazas cambiantes. El desafío de los misiles SAM llevó a Israel a ser pionero en aviones no tripulados. A pesar de superar los SAM sirios en 1982, la Segunda Guerra del Líbano presentó nuevos desafíos para los vehículos blindados de Israel.
Los años de terrorismo palestino en Judea y Samaria recalibraron las fuerzas israelíes para contrarrestar amenazas como Hezbolá. Además, la creciente amenaza de los cohetes de Hezbolá impulsó el desarrollo de sistemas defensivos como la Cúpula de Hierro.
Israel: Anticipando la próxima generación de conflictos
Israel no espera a aprender de la última guerra; se prepara para la próxima. Su visión pionera está cristalizada en la última incorporación a su arsenal: el tanque Barak.
La destreza de Rafael Advanced Defense Systems se manifiesta en este carro de combate. La firma, que ha contribuido enormemente a la industria militar israelí, juega un papel esencial en el desarrollo del tanque y en otros equipos militares icónicos como el buque de guerra Sa’ar 6.
Niv Cohen, de Rafael, enfatizó la evolución del sistema del tanque, que ahora ofrece una comprensión más amplia del campo de batalla y fortalece la defensa contra amenazas emergentes, como los drones.
La pieza central: el sistema Trophy
El sistema Trophy no es simplemente un añadido; es el corazón del Barak. Provee al equipo militar no solo defensa, sino también datos cruciales en tiempo real.
El Merkava Mark 4 Barak integra el sistema Trophy optimizado, equipando al equipo con información vital en la línea de fuego.
El mundo de la defensa, como el tecnológico, requiere adaptación constante. Cohen subraya la continua actualización de algoritmos y software para enfrentar amenazas en constante evolución en el teatro de operaciones.
Elbit Systems: Una perspectiva exclusiva
Para ofrecer una visión más profunda sobre la exclusividad tecnológica del Barak, el Jerusalem Post se acercó a Idan Tavor de Elbit Systems.
“Elbit Systems se enorgullece de las soluciones creadas para MANTAK destinadas al Barak, con especial énfasis en el software desarrollado conjuntamente con MANTAK”, señaló Tavor.
Iron Vision: Un salto en visualización de combate
El avanzado casco Iron Vision extrae conceptos de las Fuerzas Aéreas y sus pantallas de visualización frontal, permitiendo al comandante visualizar en tiempo real el exterior sin abandonar la protección de su blindaje.
Con una integración de sensores, esta tecnología proporciona una perspectiva única del campo de batalla, facilitando la coordinación y reacción tanto del artillero como del comandante, ambos equipados con el revolucionario casco.
La inteligencia artificial juega un papel crucial en la detección y la “fusión” de imágenes con la óptica. Esta IA, combinada con sistemas de control de fuego de vanguardia, potencia la letalidad y precisión en situaciones de combate móvil y bajo diversas condiciones lumínicas.
Innovaciones de software y pantallas táctiles
El software, señalado por Tavor, emerge como uno de los cambios sustanciales en esta plataforma blindada. Incorpora múltiples sensores y ofrece una interacción intuitiva y de baja exigencia cognitiva, ya sea a través de pantallas táctiles o el propio casco.
La nueva interfaz de usuario, más allá de ser operativamente eficiente, ha sido diseñada para ser intuitivamente comprensible, acelerando el proceso de capacitación.
Este software se integra perfectamente con el sistema C4i Torch de las FDI, mostrando video en tiempo real con latencia cero, una hazaña en la era moderna de combate.
Inspiración civil en tecnologías militares
Israel ha sido pionero en adaptar exitosamente innovaciones del mundo civil al ámbito militar. Los reclutas actuales, familiarizados con teléfonos inteligentes y juegos de realidad virtual, encuentran en este casco una extensión natural de sus habilidades tecnológicas.
Integrar esta tecnología a tanques de 65 toneladas, cuyos cañones resuenan con potencia, no fue tarea fácil. Fue esencial garantizar que la interfaz no produjera vértigo o complicaciones en los operadores.
El joystick: Interfaz intuitiva y resistente
La incorporación de joysticks en la maquinaria de combate, como los tanques, no solo busca la familiaridad, sino que garantiza una durabilidad que excede las expectativas de los dispositivos civiles. Esta adaptación garantiza que las operaciones se realicen con precisión y eficacia, salvaguardando las decisiones estratégicas en el campo de batalla.
Rafael y Elbit están a la vanguardia de este cambio, ofreciendo soluciones como el sistema de comunicación e-Lynx y la aplicación Torch-X, específicamente diseñadas para el vehículo Barak de MANTAK.
Tecnología: Un pilar fundamental en el futuro de los vehículos blindados
La revolución tecnológica en el ámbito militar insinúa una reducción en la necesidad de operadores humanos dentro de los tanques. A medida que avanza la tecnología, los roles tradicionales del conductor, artillero, comandante y cargador podrían ser reemplazados o adaptados. Este cambio sugiere un giro hacia una mayor automatización, pero con la preservación del juicio humano en situaciones críticas.
Inteligencia artificial: Facilitando la toma de decisiones en el campo
La inteligencia artificial juega un papel crucial en la modernización de los tanques. Esta tecnología, diseñada para mejorar la precisión de los sensores, permite distinguir entre amenazas potenciales y elementos irrelevantes. Diferenciar entre un arbusto y una amenaza real, como una persona armada con un RPG, se convierte en una tarea esencial para garantizar la seguridad del equipo y la eficacia en combate.
El verdadero desafío radica en equilibrar la cantidad de información proporcionada al operador. Inundar a la tripulación con datos puede resultar contraproducente, mientras que ofrecer la información correcta en el momento adecuado potencia la toma de decisiones efectiva.
El futuro: Tanques autónomos vigilando el horizonte
Aunque la tecnología continúa avanzando, el elemento humano sigue siendo insustituible en ciertas tareas. Un tanque posicionado estratégicamente requerirá siempre de un equipo humano para supervisar y tomar decisiones en tiempo real, aunque algunas responsabilidades físicas del pasado puedan ser delegadas a la automatización.
La visión del futuro de los tanques sugiere un equilibrio entre la tecnología autónoma y la habilidad y juicio humanos, garantizando una respuesta eficiente y precisa ante cualquier eventualidad en el campo de batalla.