Marcas en pilones de Su-24MR ucraniano evidencian el lanzamiento de misiles Storm Shadow, lo que indica tácticas aéreas específicas contra Rusia en julio de 2025.
Su-24MR ucraniano y marcas de pilones con Storm Shadow
Una imagen difundida el 7 de julio de 2025 muestra un bombardero táctico supersónico Su-24MR ucraniano en un hangar, equipado con un misil de crucero Storm Shadow británico. Las marcas en el pilón, que incluyen un número cercano a cinco y un símbolo bifurcado, sugieren un registro de misiones. Estas anotaciones, visibles cerca del soporte del misil, señalan posibles conteos de lanzamientos, una práctica habitual en campañas aéreas. La fotografía, captada en una base aérea no especificada, muestra la incorporación de tecnología occidental en plataformas soviéticas. El Su-24MR, originalmente diseñado para reconocimiento, no cuenta con radar de ataque, pero los misiles Storm Shadow se programan con coordenadas antes del despegue, lo que permite su empleo en este avión.
El misil Storm Shadow, desarrollado por Reino Unido y Francia, es un arma de largo alcance y baja observabilidad, con un alcance superior a 250 kilómetros. Su ojiva BROACH penetra estructuras reforzadas, como búnkeres o depósitos de municiones, antes de detonar, por lo que resulta adecuado para destruir centros de mando o infraestructura militar. La incorporación del misil en el Su-24MR se efectúa mediante pilones adaptados, posiblemente extraídos de aviones Tornado GR4 británicos retirados. Este procedimiento, iniciado en mayo de 2023, habilita a Ucrania para emplear el misil en aviones que no fueron diseñados con ese propósito, lo que incrementa la utilidad de sus recursos aéreos disponibles. La imagen de julio de 2025 confirma la continuación de estas actividades, con el avión resguardado en un hangar reforzado que impide su destrucción por ataques rusos.
Las operaciones con Storm Shadow desde el Su-24MR se realizan en bases como Starokostiantyniv, sede de la 7ª Brigada de Aviación Táctica. Los vuelos a baja altitud permiten evadir los sistemas de detección rusos, y los hangares aíslan a los aviones frente a misiles hipersónicos como los Kinzhal, utilizados por Rusia en julio de 2023 contra esta base. La imagen reciente presenta al avión en un entorno controlado, lo que indica una preparación detallada orientada a reducir la exposición durante la fase previa a la misión. Los datos de inteligencia, obtenidos previamente por las capacidades de reconocimiento del Su-24MR, sirven para definir con precisión los objetivos de los misiles.
La campaña aérea ucraniana con Storm Shadow ha variado desde su incorporación en mayo de 2023. Videos difundidos el 4 de agosto de 2024 por la Fuerza Aérea Ucraniana muestran el lanzamiento de estos misiles desde un Su-24M, lo que confirma su aplicación operativa. La imagen de julio de 2025, aunque centrada en el Su-24MR, ratifica la utilización de estas armas en ataques de largo alcance. Los blancos incluyen instalaciones militares rusas en regiones ocupadas como Crimea, Kherson y Zaporizhzhia, así como puntos en Rostov y Krasnodar. Estas misiones permiten a Ucrania atacar objetivos más allá de las líneas frontales mediante el uso de sistemas avanzados.
Datos clave sobre Su-24MR y Storm Shadow en Ucrania
- El Su-24MR ucraniano, adaptado para Storm Shadow, opera desde Starokostiantyniv, con vuelos a baja altitud que impiden su detección.
- Los pilones del Su-24MR contienen marcas que podrían indicar conteos de misiones, con un número cercano a cinco y un símbolo bifurcado.
- El misil Storm Shadow posee un alcance superior a 250 km y una ojiva BROACH adecuada para objetivos reforzados.
- La adaptación del misil se realiza con pilones de Tornado GR4 británicos, implementada desde mayo de 2023.
- Los hangares reforzados resguardan a los Su-24MR frente a misiles Kinzhal rusos.
- Los objetivos corresponden a ubicaciones en Crimea, Kherson, Zaporizhzhia, Rostov y Krasnodar.
Tácticas de hangar y protección del Su-24MR ucraniano
La preservación de los Su-24MR es una medida prioritaria debido a los ataques rusos contra bases aéreas ucranianas. En julio de 2023, Rusia lanzó misiles Kinzhal contra Starokostiantyniv, lo que provocó daños en la infraestructura sin destruir los aviones que se encontraban dentro de hangares reforzados. Estas construcciones, diseñadas para soportar explosiones, permiten a Ucrania conservar operativos sus activos aéreos. La imagen de julio de 2025 presenta un Su-24MR en el interior de un hangar, lo que confirma esta práctica de defensa. La planificación de las misiones, que incluye el ingreso de coordenadas en los misiles Storm Shadow, se ejecuta dentro de estas instalaciones para minimizar el tiempo en pista.
La 7ª Brigada de Aviación Táctica mantiene una flota limitada de Su-24MR y Su-24M, con estimaciones de 2015 que mencionan unos 25 aparatos activos y varios más en reserva. Las pérdidas acumuladas, que superan los 17 Su-24 derribados desde 2022, han obligado a Ucrania a racionalizar el uso de las unidades restantes. La adecuación del Su-24MR para portar Storm Shadow responde a esta exigencia, dado que su función de reconocimiento tiene menos demanda que las misiones ofensivas del Su-24M. La incorporación de misiles occidentales, como el AGM-88 HARM en MiG-29, sigue una lógica análoga de actualización mediante tecnología de la OTAN.
Los ataques con Storm Shadow requieren inteligencia detallada, habitualmente proporcionada por los propios Su-24MR en misiones anteriores. Los datos obtenidos permiten configurar las trayectorias de los misiles, que vuelan a baja altitud para eludir las defensas antiaéreas rusas, como el sistema S-400. La combinación de vuelos controlados, refugio en hangares y sistemas modernos ha hecho posible que Ucrania mantenga operativos sus Su-24MR en un entorno de combate sostenido. La imagen de julio de 2025 muestra la continuidad de estas condiciones operativas, con un avión preparado para una misión de riesgo elevado.
Las acciones con Storm Shadow se han incrementado desde 2024, con registros de ataques a objetivos en Donetsk y Luhansk en julio de 2025. Un ataque nocturno el 1 de julio de 2025 impactó la sede del 8º Ejército ruso en Donetsk mediante estos misiles. Los Su-24MR ejecutan estas misiones bajo protección de cazas MiG-29 y Su-27 equipados con misiles AGM-88 HARM, junto con dispositivos ADM-160 MALD que perturban los sistemas defensivos rusos. Esta estrategia, aplicada desde mayo de 2023, mejora las posibilidades de supervivencia de los aviones y la eficacia del armamento lanzado.
Impacto de Storm Shadow en la guerra aérea de Ucrania
El empleo de Storm Shadow por parte de Ucrania ha ampliado su capacidad de ataque aéreo, lo que ha permitido alcanzar objetivos a larga distancia con relevancia táctica. Desde su introducción en mayo de 2023, los misiles han impactado instalaciones rusas en Luhansk, Berdyansk y Sevastopol. Un ataque ejecutado en 2023 destruyó el submarino ruso Rostov-on-Don en Sevastopol, lo que evidenció la precisión del misil. La posibilidad de que el Su-24MR pueda lanzar estas armas, pese a sus limitaciones tecnológicas.
La utilización continuada de plataformas soviéticas como el Su-24MR por parte de Ucrania contrasta con los sistemas empleados por Rusia, como el misil Kh-101, que no cuenta con características de sigilo comparables al Storm Shadow. La modernización ha sido respaldada por Reino Unido, que suministra los misiles, y Francia, que evalúa alternativas mediante el SCALP-EG. La imagen de julio de 2025 documenta la persistencia de estas acciones, con los Su-24MR participando activamente en las misiones aéreas ucranianas. Los ataques realizados entre 2024 y 2025 han exigido a Rusia ajustes en sus sistemas defensivos, aunque las plataformas S-400 tienen dificultades para interceptar misiles con baja firma de radar.
La disponibilidad limitada de Storm Shadow representa un obstáculo. Sin embargo, la autorización otorgada por Reino Unido y otros aliados para emplearlos contra objetivos en territorio ruso, confirmada en noviembre de 2024, ha extendido su alcance operativo. Los Su-24MR han alcanzado bases aéreas y centros de mando en regiones como Kazan en enero de 2025, en operaciones coordinadas con drones y misiles ATACMS. Estas acciones, respaldadas por mecanismos de confusión electrónica, han permitido a Ucrania obtener resultados concretos pese a la escasez de recursos.
Las medidas adoptadas por Ucrania con el Su-24MR y Storm Shadow responden a las exigencias de la guerra. La imagen de julio de 2025, con sus marcas en los pilones, señala la continuidad del uso de estos misiles y muestra que Ucrania conserva una capacidad operativa aérea mediante una planificación técnica sostenida. La conjunción de datos de inteligencia, resguardo estructural y armamento actualizado ha permitido que los Su-24MR continúen en servicio activo.