Ucrania sigue reforzando sus defensas antiaéreas con misiles tierra-aire de corto alcance, en busca de protegerse de los ataques aéreos rusos.
Recientemente, han llegado misiles jordanos al país, pero ¿son lo suficientemente efectivos?
Ucrania: abasteciéndose de misiles
Las Fuerzas Armadas ucranianas han estado solicitando misiles tierra-aire para sus sistemas de defensa antiaérea. Estas armas son vitales para contrarrestar las ofensivas aéreas rusas. Recientemente, se han visto imágenes de misiles “naranja” del sistema táctico móvil 9K33 Osa, un arma soviética de corto alcance.
Jordania, que en 2017 retiró del servicio sus sistemas 9K33 Osa, vendió 35 unidades a Armenia en 2020. Aunque no se sabe exactamente cómo llegaron estos misiles a Ucrania, hay dos posibles vías: una transferencia directa desde Jordania o mediante la intervención de un tercero, una práctica común para evitar la participación directa en suministros a Ucrania por razones políticas relacionadas con Moscú.
Misiles “naranjas”: ¿Son efectivos?
Los misiles jordanos, del modelo 9M33M2, son menos capaces que los ucranianos, que utilizan la variante 9M33M3. Fuentes indican que los misiles jordanos tienen una tasa de interceptación del 50-60 %, mientras que los ucranianos alcanzan el 80 %. Esta diferencia de capacidad podría afectar la efectividad de la defensa aérea ucraniana.
A pesar de ello, Ucrania ha recibido donaciones de sistemas 9K33 Osa de otros países desde el inicio de la guerra. Además, el 9K33 Osa tiene un historial probado en combate, participando en conflictos militares desde los años 80 hasta la actualidad, incluyendo operaciones en Nagorno-Karabaj, Siria y la guerra civil libia en 2020.
9K33 Osa: un sistema táctico de misiles
El 9K33 Osa es un sistema táctico de misiles tierra-aire de gran movilidad, baja altitud y corto alcance desarrollado en la era soviética. Impulsado por un motor diésel D20K300, tiene una velocidad máxima de 80 km/h, pesa 17,5 toneladas y cuenta con una tripulación de cinco soldados. Los seis misiles que porta, con alcance operativo de 30 km, están en servicio en 24 países de Asia, África y Europa.
Resumen
Ucrania sigue reforzando sus defensas antiaéreas con misiles jordanos 9M33M2, aunque su capacidad de interceptación es menor que la de los misiles ucranianos 9M33M3. A pesar de esto, el sistema 9K33 Osa ha demostrado su eficacia en múltiples conflictos militares a lo largo de las últimas décadas, y sigue siendo utilizado en varios países de Asia, África y Europa.