Ucrania marcó un hito en la guerra moderna al derribar dos cazas rusos Su-30 Flanker, valorados en 50 millones de dólares cada uno, utilizando drones marítimos en el mar Negro.
Ucrania logra hito militar con drones marítimos en mar Negro
El viernes 2 de mayo de 2025, Ucrania marcó un hito en la guerra moderna al derribar dos cazas rusos Su-30 Flanker, valorados en 50 millones de dólares cada uno, utilizando drones marítimos en el mar Negro. La operación, ejecutada por la unidad especial Grupo 13 de la Dirección de Inteligencia de Defensa (GUR), ocurrió a 50 kilómetros al oeste de Novorossiysk, un puerto clave ruso. Según la GUR, los drones Magura-7, una variante de defensa aérea del Magura-5, dispararon misiles AIM-9 Sidewinder guiados por infrarrojos, logrando lo que Kyiv describe como la primera destrucción de aviones de combate por drones marítimos en la historia. Kyrylo Budanov, jefe de la GUR, confirmó que dos cazas fueron alcanzados, aunque solo hay imágenes de uno. El Su-30, un avión bimotor y biplaza diseñado por Sukhoi Design Bureau, se incendió en el aire y cayó al mar, según un video publicado por la GUR.
‼️For the first time in history, Warriors from Ukrainian Defense Intelligence destroyed an enemy combat aircraft with a strike from Magura sea drone.
— Anton Gerashchenko (@Gerashchenko_en) May 3, 2025
The strike was carried out by Group 13, a special unit of the Defense Intelligence in coordination with Security Service of… https://t.co/aUhktjUP7n pic.twitter.com/5cixykIOPa
La operación contó con la coordinación de la SBU (Servicio de Seguridad de Ucrania) y otras unidades de las fuerzas armadas ucranianas. El ataque se produjo cerca de Novorossiysk, donde Rusia ha reubicado gran parte de su Flota del mar Negro tras los daños sufridos en Sevastopol, Crimea. Los drones Magura, equipados con misiles adaptados como el AIM-9, representan una evolución en la estrategia ucraniana, que ha utilizado estas plataformas para atacar buques rusos y ahora, por primera vez, aviones. Budanov explicó al medio The War Zone que tres drones Magura-7 participaron, con dos disparando contra los cazas. El Ministerio de Defensa ruso no comentó oficialmente, pero un bloguero ruso cercano al ministerio, Fighterbomber, admitió en Telegram que un Su-30 fue derribado y que la tripulación quedó rodeada por drones ucranianos en el agua.
El mismo día, Novorossiysk sufrió un ataque con drones ucranianos que dañó un terminal de granos y edificios residenciales, dejando cinco heridos, incluidos dos niños, según el alcalde Andrey Kravchenko. Esto llevó a declarar un estado de emergencia en la ciudad. Horas después, Rusia respondió con un ataque nocturno de drones sobre Kyiv, que dejó 11 heridos y causó incendios en edificios residenciales. La fuerza aérea ucraniana reportó haber interceptado 64 de 150 drones rusos esa noche. Este intercambio de ataques refleja la intensificación de la guerra en el mar Negro, donde Ucrania ha logrado victorias significativas contra la flota rusa.
Los drones Magura han sido clave en la estrategia naval ucraniana. En diciembre de 2024, un Magura-5 derribó dos helicópteros rusos Mi-8 con misiles, demostrando su versatilidad. Los Magura-7, equipados con misiles aire-aire como el AIM-9 o el R-73 Archer adaptado (denominado Sea Dragon en plataformas marítimas), han ampliado su capacidad para enfrentar amenazas aéreas. Según Naval News, los misiles infrarrojos, originalmente diseñados para aviones, han sido modificados con asistencia británica para lanzarse desde drones terrestres y marítimos, aumentando el alcance de Ucrania en el mar Negro.

Datos clave sobre el derribo de los Su-30 en Novorossiysk
- Fecha: 2 de mayo de 2025, cerca de Novorossiysk, a 50 km de la costa.
- Arma: Drones Magura-7 con misiles AIM-9 Sidewinder.
- Objetivo: Dos cazas Su-30 Flanker, valorados en 50 millones de dólares cada uno.
- Unidad: Grupo 13 de la GUR, con apoyo de la SBU.
- Impacto: Primera vez que drones marítimos derriban aviones de combate.
- Contexto: Ataque ucraniano simultáneo dañó infraestructura en Novorossiysk.
Avances tecnológicos y estratégicos de Ucrania en la guerra
El uso de drones marítimos para derribar aviones representa un cambio en la guerra naval. Naval News destaca que el Magura-7, una evolución del Magura-5, permite a Ucrania proyectar poder a cientos de kilómetros de su costa, forzando a los aviones rusos a operar a mayor distancia y usar armas más costosas. Los Su-30 derribados operaban en el este del mar Negro, a más de 500 km de Odesa, lo que subraya el alcance de estas plataformas. La GUR afirmó que el ataque no solo destruyó equipos costosos, sino que también debilitó la capacidad de Rusia para contrarrestar los drones ucranianos en la región.
El mar Negro ha sido un teatro crítico en la guerra. Desde 2022, Ucrania ha utilizado drones marítimos para dañar buques rusos, como el Ivanovets, y forzar a la Flota del mar Negro a replegarse de Sevastopol a Novorossiysk. Cada dron Magura lleva al menos 250 kg de explosivos, pero su adaptación para lanzar misiles aire-aire ha ampliado su rol. Reuters reportó que el ataque del 2 de mayo ocurrió mientras Rusia preparaba las celebraciones del Día de la Victoria el 9 de mayo, lo que generó especulaciones sobre una posible contraofensiva ucraniana. El presidente Volodymyr Zelensky rechazó un alto el fuego de tres días propuesto por Vladimir Putin, insistiendo en un cese de hostilidades de al menos 30 días.
La falta de comentarios oficiales del Ministerio de Defensa ruso contrasta con las afirmaciones de blogueros militares rusos, como Fighterbomber, quien confirmó la pérdida de al menos un Su-30. Según Newsweek, el derribo de los cazas agrega una nueva dimensión a las capacidades de Ucrania, especialmente tras el rechazo de Putin a un alto el fuego. El The Guardian señaló que el ataque ocurrió en el día 1,166 de la guerra, destacando la ausencia de respuesta oficial de Moscú. La operación también se produce en un contexto de tensiones diplomáticas, con Zelensky acusando a Rusia de violar acuerdos previos, como un alto el fuego de Pascua en 2024.

Rusia ha intensificado sus ataques en represalia. El Telegraph reportó que el Ministerio de Defensa ruso afirmó haber derribado 170 drones ucranianos y ocho misiles de crucero la noche del ataque a Novorossiysk. En Kharkiv, un bombardeo ruso dejó 50 heridos, mientras que en Zaporizhzhia, otro ataque con drones mató a tres personas. Estos incidentes reflejan la escalada en ambos frentes, con Ucrania enfocada en debilitar la infraestructura militar rusa en el mar Negro y Rusia respondiendo con ataques a ciudades ucranianas.
Impacto regional y global del incidente en Novorossiysk
El derribo de los Su-30 tiene implicaciones más allá del campo de batalla. Business Insider señaló que los cazas, con un costo de 50 millones de dólares por unidad, representan una pérdida significativa para Rusia, tanto en términos económicos como operativos. La capacidad de Ucrania para atacar aviones a gran distancia con drones marítimos podría obligar a Rusia a replantear su estrategia aérea en el mar Negro. Además, la asistencia británica en la adaptación de misiles como el Sea Dragon indica un apoyo occidental creciente a las capacidades tecnológicas de Ucrania.
El incidente también destaca la evolución de la guerra naval. Times Now reportó que el ataque a Novorossiysk dañó infraestructura crítica, como un terminal de granos, afectando las exportaciones rusas. La declaración de emergencia en la ciudad subraya la vulnerabilidad de los puertos rusos ante los drones ucranianos. Moneycontrol destacó que el Su-30, descrito como un avión de combate avanzado, fue “engulfado en llamas” antes de estrellarse, según el video de la GUR. Este éxito táctico refuerza la narrativa ucraniana de resistencia frente a un enemigo con mayor capacidad militar.
En el ámbito diplomático, el ataque ocurre en un momento de estancamiento en las negociaciones de paz. BBC News reportó un acuerdo previo entre Rusia y Ucrania en marzo de 2025 para garantizar la navegación segura en el mar Negro, pero la desconfianza mutua ha impedido avances. Zelensky acusó a Rusia de tergiversar los términos, mientras Moscú exigió claridad en la respuesta ucraniana a un alto el fuego propuesto. ABC News señaló que los ataques ucranianos, como el bombardeo de drones a Moscú en marzo de 2025, buscan presionar a Rusia mientras se negocian posibles ceses de hostilidades.
La guerra en el mar Negro sigue redefiniendo las tácticas militares. El uso de drones Magura para derribar aviones demuestra la innovación ucraniana frente a la superioridad numérica rusa. A medida que la guerra se intensifica, el éxito de operaciones como la del 2 de mayo refuerza la capacidad de Ucrania para desafiar a Rusia en un teatro estratégico clave.