Ucrania interceptó un dron ruso DAN-M, usado como misil de crucero, en un enfrentamiento nocturno sobre el mar Negro.
Incidente del dron DAN-M en el mar Negro
En la mañana del 29 de mayo de 2025, la Dirección general de Inteligencia (GUR) de Ucrania informó que derribó un dron ruso a reacción identificado como DAN-M sobre el mar Negro. El sistema, desarrollado por la OKB Simonova (Sokol Design Bureau), presentaba una nueva ojiva y posiblemente una sección de guía modificada, lo que sugiere su uso como un misil de crucero. Un video del enfrentamiento nocturno mostró un misil disparado desde un lanzador terrestre, capturado en imágenes infrarrojas, impactando un objeto que cayó al agua, confirmando la intercepción.
El misil utilizado para derribar el dron fue probablemente un R-73 Archer, adaptado como misil tierra-aire. Según reportes, el ataque ocurrió cuando uno o varios drones DAN-M fueron lanzados desde Crimea. El dron, originalmente un objetivo reactivo para pruebas, fue convertido en un vehículo aéreo no tripulado (UAV) de impacto, posiblemente para probar las defensas aéreas ucranianas y forzar un dilema entre proteger instalaciones en Odesa o preservar misiles antiaéreos.
El incidente se produce tras la pérdida de dos cazas rusos Su-30SM los días 2 y 3 de mayo de 2025, derribados sobre el mar Negro por misiles AIM-9, adaptados para ser disparados desde un buque de superficie no tripulado Magura V7. Ucrania también recibió en febrero de 2025 dos sistemas Gravehawk británicos, que emplean misiles R-73 como defensa antiaérea. Quince unidades adicionales están programadas para entregarse este año.
El DAN-M interceptado fue derribado por un sistema móvil equipado con misiles R-73, desarrollado por la GUR con apoyo extranjero. No se confirmó si el sistema Gravehawk estuvo involucrado, ya que Ucrania utiliza múltiples plataformas para emplear el R-73 como misil antiaéreo.
Datos clave sobre el dron DAN-M
- Desarrollado por la OKB Simonova como dron objetivo reactivo.
- Capaz de volar a 9.000 metros de altitud y velocidades de 450-700 km/h.
- Autonomía de 25 a 40 minutos, con un alcance de 300-400 km.
- Propulsión dorsal con motor turborreactor MGTD-125E, introducido en 2020.
- Diseño similar al dron iraní Karrar, con posible confusión en la identificación.
Evolución de la guerra en el mar Negro
El DAN-M comparte similitudes con los drones soviéticos Strizh-141/143, que Ucrania convirtió en misiles de crucero en 2022 para atacar bases aéreas rusas. Su diseño, con la propulsión montada dorsalmente desde la admisión hasta el escape, es característico de drones objetivo de generaciones anteriores. A diferencia de los misiles de crucero convencionales, el DAN-M prioriza capacidad de navegación sobre sigilo, buscando atraer fuego antiaéreo.
Videos difundidos en redes sociales mostraron un helicóptero Mi-8 transportando dos drones DAN-M en pilones exteriores, lanzándolos con motores encendidos tras descender. Otro video mostró un DAN-M disparado desde un lanzador terrestre con un propulsor desechable, descendiendo con paracaídas al final. Estas grabaciones, posiblemente de pruebas rusas previas, no corresponden al incidente del 29 de mayo, cuyo método de lanzamiento no fue revelado.
En 2020, Rusia mejoró el DAN-M con nueva electrónica y el motor MGTD-125E, reemplazando al MD-120. Este sistema permite ataques a objetivos con coordenadas conocidas a distancias de 300 a 400 km. Su despliegue en el mar Negro refleja una estrategia para saturar las defensas ucranianas, que evitan usar sistemas avanzados como Patriot, NASAMS o SAMP/T contra objetivos de bajo costo como el DAN-M.
El 26 de mayo de 2025, un reporte indicó que las defensas Patriot alrededor de Kiev no garantizan protección total contra misiles balísticos rusos, evidenciando las limitaciones de los sistemas occidentales frente a tácticas de saturación. Ucrania ha adaptado misiles como el R-73 y AIM-9 para contrarrestar amenazas como el DAN-M, optimizando recursos frente a drones y misiles de menor costo.
Contexto estratégico de la guerra
El uso del DAN-M subraya la innovación táctica en la guerra del mar Negro, donde Ucrania mantiene una ventaja en enfrentamientos navales y aéreos, mientras Rusia lidera en operaciones terrestres. La conversión de drones objetivo en armas ofensivas, como el DAN-M, busca explotar las limitaciones de las defensas aéreas ucranianas, que deben equilibrar la protección de infraestructuras clave con la conservación de misiles.
La posible confusión con el dron iraní Karrar, que comparte un diseño similar, plantea dudas sobre la identificación precisa del sistema. Además, reportes sugieren que el DAN-M no se produce en masa, lo que podría limitar su impacto estratégico. Sin embargo, su uso experimental indica un esfuerzo ruso por diversificar tácticas y desafiar las capacidades ucranianas en el teatro marítimo.
la guerra en el mar Negro ha visto un aumento en el uso de drones y misiles adaptados, como el Magura V7 y los sistemas Gravehawk, reflejando una carrera tecnológica entre ambos bandos. La intercepción del DAN-M el 29 de mayo demuestra la capacidad ucraniana para responder a estas innovaciones, aunque el desgaste de recursos defensivos sigue siendo un desafío crítico.