“Los procesos de votación en los diferentes foros internacionales, así como los mecanismos para su implementación a través de representantes de Cabo Verde, no fueron tratados ni debatidos ya que implican una articulación entre dos organismos soberanos según la competencia de cada uno”, aseguró en la noche de ayer, martes, el presidente de Cabo Verde, Jorge Carlos Fonseca, quien de ese modo elíptico desmintió al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que había anunciado que ese archipiélago africano ya no sufragaría contra el Estado judío en las Naciones Unidas.
El mandatario aclaró que “atribuye la mayor importancia a las relaciones internacionales” y por eso se reunió, en junio, con el jefe de gobierno hebreo en el marco de una conferencia de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental en Monrovia, Liberia [foto], con quien “se abordaron varios temas relacionados con la cooperación entre los dos países, como la agricultura, la energía, el turismo y la seguridad, y ambos reiteraron el interés mutuo en fortalecer esos vínculos”.
Fuentes diplomáticas en Jerusalén atribuyeron este presunto giro radical a la presión ejercida por árabes que se oponen fervientemente a las incursiones de Israel en África, que tienen como antecedente las sufridas por Togo por parte de la Autoridad Palestina, Marruecos e Irán para frustrar una cumbre bilateral en octubre.
Fuente: itongadol.com.ar