El embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, criticó la investigación realizada por la ONU sobre la UNRWA, la cual reveló que nueve empleados podrían haber estado involucrados en los ataques del 7 de octubre, calificándola como “una vergüenza” y “demasiado poco y demasiado tarde”.
Según Erdan, la investigación “pasó por alto a miles de empleados de la agencia que están implicados en el terrorismo de Hamás… Israel proporcionó a la ONU información detallada sobre más de 100 empleados de la UNRWA que son miembros de Hamás”.
Erdan argumenta que, a pesar de la información que Israel entregó, “las conclusiones de la investigación son otra vergüenza para la ONU, que continúa rechazando aceptar la realidad”.
Además, Erdan destacó que “si esto no fuera suficiente, recientemente el secretario general decidió otorgar a la UNRWA-Gaza el Premio del secretario general de las Naciones Unidas 2023.
El secretario general debería dimitir y la UNRWA debería cerrarse”.